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La suerte de Antonio Machado

La suerte de Antonio Machado

De semblante serio, poco comunicativo y con traje descuidado, Antonio Machado se presentaba de vez en cuando a las tertulias celebradas en los concurridos cafés de la España de principios del siglo XX. De aquellas fechas, Luis G. Urbina lo recuerda como un resignado de la vida.

Para Antonio, a diferencia de su hermano Manuel, París significó algunas amargas experiencias. Una de ellas marcada por el inicio de una enfermedad virulenta que padeció su esposa. En otra ocasión, París estaba dividida por el caso Dreyfus; los hermanos Machado, junto con Pío Baroja, observaban el transcurso de una manifestación, cuando se desató la violencia entre la policía y los opositores. Los  tres escritores se echaron a correr. Durante la huida, Antonio perdió uno de sus zapatos: era eso o la vida.

El poeta sevillano fue un detractor de la academia, por lo que no consiguió el grado de bachiller hasta 1900. Sin embargo, sus largas visitas a la biblioteca le dieron sentido a su existencia.

Antonio Machado falleció a los 63 años en Colliure, Francia, el 22 de febrero de 1939.+