La ilustración científica le devuelve la humanidad a la ciencia: Anna Escardó
21 de noviembre 2022
La comunicadora y editora catalana Anna Escardó es la autora de Science Illustration: a history of visual knowledge from the 15th century to today, un libro que recoge cerca de 300 ilustraciones científicas que datan desde el primer dibujo detallado de la luna hasta una representación de las células madre. Publicado por Taschen, el volumen recorre la historia visual del conocimiento desde el siglo XV hasta la actualidad.
En entrevista con Lee+, Escardó dijo que “la ilustración científica ilustra, de hecho, muestra, información científica”, y que nuestros antepasados, para explicarse las cosas necesitaban dibujos que explicaran lo que los textos no podían. “Por ejemplo, ¿podríamos explicar con dos o tres palabras lo que es la física cuántica?”, se preguntó. “A mí ni con dos mil o tres mil palabras, pero un simple esquema, una simple infografía, te lo puede explicar muy bien”, respondió.
También explicó que hoy en día “nos hemos especializado tanto en la ciencia que ahora dos científicos de la misma disciplina pero de diferente rama, no se entienden. Entonces, ¿qué pasa? que tienen que divulgar sus trabajos a través de ilustraciones. Está en boga, está más al día que nunca”.
La ilustradora explicó que eligió la revolución copernicana como punto de inflexión de la ciencia moderna porque justo ese año, 1543, se publicó también el libro de Vesalio, una anatomía humana impresionante, que es la primera obra anatómica que hizo con modelos de cadáveres humanos, porque antes se hacía con modelos de cadáveres de puercos o de monos”.
Al recordar que Vesalio era un humanista, Anna Escardó afirmó: “creo que con la ilustración científica tenemos una buena base para devolverle la humanidad a la ciencia”.
Con respecto al proceso de seleccionar y descartar las ilustraciones que debía incluir en el libro, Escardó afirmó que no fue nada sencillo, pero se decantó por “aquellos hitos científicos que cambiaron la humanidad en algún punto eran las que merecían la pena incluirse”, y aclara que “no obstante, el libro excluye las ciencias sociales, que no dejan de ser ciencia, y pensamos que a la mejor en un segundo volumen incluiríamos las ciencias sociales.
Por otra parte, continuó Escardó, “todo el mundo es capaz de entender la ciencia, lo que pasa es que nos la han explicado mal. O has sufrido con un mal profesor de física en la escuela que ya te ha torcido tu concepción de la física de por vida, ¡qué desgracia!”