El poder, el pasado y la reconstrucción de quienes somos. Entrevista a V. E. Schwab

El poder, el pasado y la reconstrucción de quienes somos. Entrevista a V. E. Schwab

V. E. Schwab, como firma sus libros para separar su vida como autora de los asuntos privados, lanzó en 2023 una nueva trilogía, Los frágiles hilos del poder (Urano), en la cual retoma el universo de la serie Sombras de magia (Urano, 2015-2017) y presenta nuevos personajes, mismos escenarios y renovadas batallas entre el poder de la magia y de los gobernantes en tres Londres que han sobrevivido paralelamente. La escritora estadounidense considerada una de las mejores plumas contemporáneas de ciencia ficción y cuyas obras han sido traducidas a más de veinte lenguas, conversó con Lee+ sobre esta nueva serie, la importancia del pasado, el miedo a enfrentar nuestro caos interno y la constante reconstrucción de las ciudades que forman parte de su mundo de fantasía urbana.

Invertiste mucho tiempo en la creación de Los frágiles hilos del poder, ¿cómo te sientes ahora que ves publicada nueva trilogía?

No entro a nada a la ligera, así que cuando terminé la primera trilogía me prometí no volver a este mundo a menos que tuviera un plan realmente sólido. Para mí esto era un conjunto de resultados a lograr, así que me tomó unos tres o cuatro años resolver cómo quería manejar Los frágiles hilos del poder después de Sombras de magia. No quería un elenco totalmente nuevo y tampoco que se tratara sólo de una continuación de los tres primeros libros. Quería sentir que era necesario, importante. Por eso me moví siete años hacia el futuro: para que pudiéramos ver cómo la gente y este mundo habían cambiado después de Conjuro de luz. Necesitaba un nuevo arco, una nueva era y un nuevo desafío en la historia. Me tomó varios años unir todo esto y un par más escribir lo que se convertiría en Los frágiles hilos del poder.

Empiezas este libro con esta frase “La gente solía hablar de crecer como si fuese un gran logro, pero…”. ¿Estás hablando del crecimiento propio y del crecimiento de la historia dentro de ti?

Pienso mucho en el crecimiento, especialmente como creadora. Cuando escribes, quieres que cada historia se convierta en una manera de crecer y esto nunca es lineal: no se pasa de malo a bueno ni de bajo a alto; resulta más orgánico, una expansión en todas las direcciones. Así que pienso mucho en el crecimiento en cuanto a la narrativa. Si lo piensas desde la parte técnica, hay cuatro perspectivas y una historia limitada en Sombras de magia. Esto ha evolucionado en cada uno de los libros, porque el mundo y los personajes se expanden y mi compromiso con los personajes también se ha transformado.

También crece el pasado con esta trilogía, que es algo nuevo en tu trabajo. Estás llevando la historia hacia el pasado y le das un gran peso.

Una de las razones por las que quería empezar con esos siete años hacia adelante era dar esta sensación de un nuevo comienzo, una puerta nueva que se abre… pero eso también significaba que había siete años de historia pasada muy importantes para la narrativa. Pienso mucho en la diferencia entre contar cronológicamente, que es el orden en que sucedieron las cosas, y la narrativa de la historia, que es el orden en que te lo cuento.

Te diste la oportunidad de contarnos una historia anterior para cada uno de los personajes. ¿Cómo fue sumergirte en sus pasados?

Me encantó porque se trata de un trabajo que igual habría hecho como escritora. Lo que somos es la consecuencia de lo que hemos sido y lo que nos ha pasado. Una de las tesis de esta serie consiste en que todo lo que hacemos ―cómo confiamos, tememos, luchamos― es producto de las cosas que nos han sucedido antes. Así que el pasado forma quiénes somos ahora; lo que está en el pasado de Lila Bard le ha dado forma a Lila Bard; lo que le sucedió a Tes y Kosika conforma a las personas que son y en las que se convertirán. El pasado representa una parte integral en la narración, porque es lo que hace que algo nos importe. 

El pasado también da forma a la sociedad. ¿Es por eso que quisiste decirnos cómo eran los tres Londres en la historia?

Claro. Estas dos series empiezan 200 años después del cataclismo. Nunca hemos ido hasta allá temporalmente, pero hemos estado yendo y viniendo en el tiempo hacia ese momento. 

Y, siete años después, los otros Londres se consideran un problema. ¿Crees que es así como percibimos a otras naciones hoy en día? 

Siempre hay una cultura de dentro y otra de fuera. Y siempre, cuando hay problemas, buscamos culpar a las personas que están fuera de nuestro sistema, nuestra familia o nuestra sociedad… de nuestro mundo. Así que resulta natural que el Londres Rojo parezca culpar al Londres Blanco, y el Blanco al Rojo. El Blanco parece culpar al Negro y al Gris. Como si buscáramos conflictos en otra parte para no mirar nuestros propios problemas y la responsabilidad dentro de nuestras propias sociedades. Incluso, si ahora estos mundos están separados uno del otro, no fueron cortados el uno del otro en el pasado. Me parece muy importante entender que los límites son cambiantes: lo que estaba dentro ahora está fuera; lo que era parte de nuestro mundo ahora está lejos. Actuamos como si las fronteras siempre hubieran estado ahí, pero no es así. Las fronteras las creamos nosotros y se mueven todo el tiempo, volviéndose más fuertes o débiles. 

Dices que “ocupar el trono es barato, reparar el mundo sale caro”. Háblanos de la relación entre poder y gobierno en esta historia.

Esto es algo que ocurre tradicionalmente en el Londres Blanco, donde el trono ha sido tomado por la fuerza. Quien tiene más poder toma el trono y lo mantiene hasta que alguien se lo quite, es un sistema muy simplificado. Kosika está descubriendo que hay una diferencia entre tomar y usar el trono, y ganarse el trono, incluso empuñar el trono para mejorar el mundo, que es el trabajo y la obligación de un gobernante. Hay muchos reyes y reinas en estos libros y todos se enfrentan a esto, existen desde una posición de poder y ¿qué hacen?, ¿lo usan para ser más fuertes o para fortalecer a su sociedad? 

Tienes tres personajes femeninos con orígenes y posiciones muy diferentes, pero, de alguna manera, Kosika, Nadiya y Tes están desafiando al sistema todo el tiempo. ¿Cómo las imaginaste? ¿Cómo lograste conectarlas en la historia?

Me parece muy interesante que, a pesar de que estos libros son muy adultos, las dos nuevas protagonistas son adolescentes. Esto se debe a que tienen poder en diferentes formas. Tes tiene la habilidad de manipular las reglas de la magia, pero es una fugitiva; Kosika es la reina y tiene una de las magias más poderosas que existen en este universo. Y, sin embargo, por tratarse de adolescentes, son vistas como objetos y no como personas. Los adultos que las rodean quieren tomar su poder y están en peligro de ser utilizadas por quienes las rodean. Ambas están aprendiendo a resistir frente a las fuerzas que les quitan poder y que utilizan su magia para su propio beneficio. Están aprendiendo, esencialmente, a decir que no, a defenderse por sí mismas. Hablemos de ficción contemporánea ambientada aquí y ahora, pero, con o sin magia, en donde sea, esto es algo que todas las adolescentes tienen que aprender a defender: el derecho a su autonomía, a su libertad, destino, decisiones y a su propio poder. 

Tu narrativa implica personajes que no resultan totalmente buenos o malos, sino que tienen motivaciones humanas y están tomando decisiones sobre sus familias y las personas que aman.

Quiero escribir personajes que se sientan como personas, y es que no existimos en blanco y negro. No pertenecemos a los extremos de esos polos, sino a algún punto intermedio. No somos buenos ni malos, somos desordenados. A veces egoístas y a veces desinteresados. Existen personas a las que amamos, por las que nos sacrificaríamos, y otras por las que no. Y creo que, lo que hemos visto históricamente en la ficción, especialmente con las mujeres jóvenes, es que cuando les das poder también debes hacerlas abnegadas, hacer que estén dispuestas a darlo todo por el bien común. De todas las chicas que leído o que he conocido se espera que se hagan más pequeñas para que otras personas puedan ser más grandes. Este tema es continuo y recurrente.

Dices “Las casas, como las vidas, pueden ser reconstruidas”. ¿Esta historia va a reconstruirse con personajes que ya aprendieron a controlar su poder? 

Habrá que seguir leyendo. Definitivamente, hay varias formas de reconstrucción que ocurren en los libros, pero también mucha destrucción. El argumento de algunos de los destructores es que las cosas deben derribarse para que la reconstrucción resulte posible. Siempre hay un periodo de caos antes de un nuevo sentido del orden. La cuestión, sin embargo, es que hay gente que no quiere el caos, sino mantener el orden actual; y hay gente que desea destruir el orden actual para encontrar uno nuevo, en un esfuerzo por una nueva era. Vamos a ver mucha destrucción, pero también muchos intentos de crear. La sanación y la reparación forman parte de esto, pero también el daño.