Entrevista a Marlene Taschen, libros para optimistas

Entrevista a Marlene Taschen, libros para optimistas

23 de septiembre de 2021

Julio Trujillo

Es difícil encontrar una casa que no tenga un libro de TASCHEN. Ante los precios prohibitivos de los libros de arte, esta editorial encontró la fórmula para ponerlos al alcance de la mayoría. Ahora, en su 40 aniversario, platicamos con su directora ejecutiva, Marlene Taschen, quien no tardó en felicitar a Gandhi por sus 50 años.

Dicen que la vida comienza a los 40. ¿Está comenzando la vida para TASCHEN?

Permíteme comenzar la entrevista enviando mis felicitaciones a las librerías Gandhi por su 50 aniversario. Mantenerse en este negocio durante tantas décadas es un fantástico logro. Personalmente, creo que sólo funciona si eres capaz de evolucionar con los años. Y volviendo a tu pregunta, pienso que la vida a los 40 sigue. Se trata de un capítulo nuevo que forma parte de la misma historia. El panorama editorial ha cambiado enormemente desde que mi padre inició su negocio, hace 40 años; por ende, nuestra editorial y nosotros mismos. Pero nuestros valores siguen tan vigentes como antes: hacer publicaciones incluyentes, independientes e inspiradoras. Para celebrar nuestro 40 aniversario, hemos creado una nueva serie, que incluye títulos icónicos del programa como David Hockney, Basquiat y Peter Lindbergh, más compactos, a un precio muy asequible, y con la misma calidad impecable que nos caracteriza. Quiero añadir que hemos tenido el privilegio de poder comunicar al mundo el trabajo y la visión de incontables artistas y espíritus libres durante estos 40 años, y no podemos dejar de agradecerles a socios tan valiosos como Gandhi que nos hayan apoyado a lo largo de este viaje.

Has sido directora ejecutiva por cuatro años y creciste rodeada de libros de TASCHEN. ¿Qué aportaciones has traído a la compañía?

Creo que mi gran contribución a la empresa es mi energía y, con ella, mi deseo de cambiar, colaborar y crecer. Pero también de cuidar y de atesorar los grandes cimientos que tiene la editorial, para poder construir desde ellos y no tratar de reinventar la rueda.

¿Cómo equilibras ser madre y directora?

Encuentro que tener hijos y trabajar es una buena combinación. Para mí, ser madre ha resultado una experiencia expansiva, me suma más de lo que me quita. Por supuesto, en estos tiempos del coronavirus, ha ayudado el hecho de que el mundo se ralentizara, y que trabajar desde casa y viajar menos se convirtiera en la norma. Sin olvidar el hecho de que tengo una pareja que es un muy buen padre, muy amoroso con nuestras dos hijas.

¿Se puede democratizar el lujo?

Sí, en efecto. Y TASCHEN es un ejemplo de ello. Nuestro leit motiv ha sido siempre hacer libros de arte accesibles para todos los bolsillos. Y cualquiera que sea el precio que marque la etiqueta, producimos todos nuestros libros con la misma atención por los detalles y los más altos niveles de calidad.

Tal vez el mayor logro de TASCHEN haya sido poner libros de arte al alcance de todos. ¿Cómo lo consiguieron?

Mi padre inició la editorial con ese objetivo: hacer libros de arte accesibles para todos. Los libros de edición limitada se realizan sin tener en cuenta el presupuesto, pero, posteriormente, reutilizamos los contenidos con diferentes formatos y precios. Así todos nuestros lectores tienen la oportunidad de comprar los libros que les gustan de acuerdo con el presupuesto del que disponen.

¿Cómo eligen sus títulos?

Somos una editorial transversal e incluyente; no utilizamos tanto la mercadotecnia como la intuición y la inspiración para escoger los títulos que queremos hacer; de otra manera, hay libros que jamás hubieran podido hacerse. Sencillamente, hacemos los libros que nos gustan. Algunos tienen su origen en relaciones personales con artistas, y, así, en muchos casos, un proyecto lleva a otro, siempre y cuando ambas partes estemos contentas de seguir trabajando juntas.

Cada título implica el trabajo de mucha gente. ¿Te gusta seguir de cerca el proceso editorial?

Tanto mi padre como yo nos involucramos completamente en cada proyecto. Hacer libros con los estándares de producción a los que estamos acostumbrados requiere un tremendo esfuerzo, pero el resultado vale la pena.

También hacen libros de lujo. ¿Cómo equilibran ambos productos?

Después de 40 años en el negocio y con un rango tan amplio de títulos, que van desde los 10 dólares hasta ediciones de arte para coleccionistas de 35 mil, esto se ha convertido en nuestro ADN. Pero creo que necesitas una cierta libertad de espíritu para ello. Algunas cosas en la vida se dan de manera simultánea; la vida no es blanco o negro.

¿Qué te ha enseñado TASCHEN sobre los hábitos de los lectores? ¿Cuáles son sus preferencias?

Llegamos a una audiencia muy amplia. Encontramos un ejemplo reciente en el libro de Virgil Abloh, Icons, que superó todas nuestras expectativas, o la edición de colección de Depeche Mode, que se agotó en un fin de semana. Todos nuestros libros encuentran sus lectores. También hemos incrementado nuestro interés en temas ecológicos, como es el caso del libro de Julia Watson, Lo-TEK, o Amazônia, de Sebastião Salgado, recién salido de imprenta.

¿Cómo es tu relación profesional con tu padre, Benedikt Taschen?

Cada uno tiene sus propias ideas, pero tenemos una relación personal y profesional muy fluida. Mi padre confía en mí cien por ciento. Somos muy afortunados de poder trabajar juntos.

¿Cómo ha sido tu colaboración con Rem Koolhas?

Extraordinaria. Hemos hecho cinco libros con él hasta ahora. Los dos últimos son A Countryside Report y el inmenso Elements of Architecture, que son ya una referencia para arquitectos y estudiantes de arquitectura. Rem ha sido una gran inspiración para jóvenes profesionales de hoy en día; a través de sus libros, ha logrado introducir en nuestra editorial a alguien como Virgil Abloh, quien llegó a TASCHEN gracias a su admiración por Rem. Es muy bonito ver cómo una generación inspira a la siguiente.

La realidad de hoy no es bonita. Es un mundo de desigualdad, enfermedad, violencia y fragilidad ecológica. ¿Cómo se ve TASCHEN en este contexto?

Desde la publicación del libro Genesis, de Sebastião Salgado, colaboramos con el Instituto Terra, creado por él y por su esposa, Lélia Wanick, comprando créditos de carbono cero. Gracias a esta iniciativa, cada libro de TASCHEN siembra una semilla. También hemos renunciado al embalaje y retractilado con plástico en un alto porcentaje de nuestros libros.

Los libros de TASCHEN son visuales, pero el texto también juega un rol. ¿Cómo se definen los contenidos?

Un ejemplo reciente es el libro Gio Ponti, una edición que presenta toda su obra —que en breve llegará a México— y, además de un impecable diseño, cuenta con los textos de dos especialistas: Salvatore Licitra, que es el director del archivo de Ponti, y Stefano Casciani, quien fue director de la revista Domus; además de Brian Kish y, por supuesto, Lisa Ponti. Convocamos a los mejores autores para cada título.

¿Tienes libros favoritos de TASCHEN?

Este año publicaremos el XXL de Las pinturas completas de Frida Kahlo. Se trata de un volumen sin precedentes sobre esta gran artista mexicana, fruto de una investigación realizada a lo largo de dos años por Luis Lozano, el autor, en colaboración con dos grandes especialistas, Andrea Kettenmann y Marina Vázquez Ramos. Fue un esfuerzo tremendo para nosotros. Pero logramos un libro a la medida de su obra, con un catálogo razonado, una biografía amena y en detalle, con una calidad de imágenes y un diseño asombrosos.

¿Hay un libro que sueñes con publicar y no hayas podido?

Hasta ahora hemos podido hacer todos los libros que nos hemos propuesto. Es verdad que algunos proyectos se resisten a veces más que otros.

En cuanto a libros, ¿el tamaño importa?

Es importante hasta cierto punto. Nos gusta hacer libros grandes, porque así la obra de un artista se puede admirar en todo su esplendor. Pero solemos hacer un mismo libro en diferentes formatos.

¿Ha cambiado tu filosofía de trabajo con la pandemia?

Si no hubiera existido la pandemia, TASCHEN hubiera tenido el mejor año de su historia en 2020. Nos ha afectado, claro, pero también nos ha servido para enfocarnos en lo importante, reducir lo superfluo y ser más flexibles. Y hemos seguido haciendo libros con la misma pasión que siempre. Nuestro lema es hoy más vigente que nunca: “Hacemos libros para optimistas”. +