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Cincuenta: autobiografía feroz

Cincuenta: autobiografía feroz

Por Bernardo Fernández, Bef

7 de junio de 2022

  1. Antes de la pandemia (ahora medimos nuestra vida antes y después de ella), el escritor canadiense David Morrell, autor de First Blood, novela protagonizada por el inefable John James Rambo, publicó en Twitter que su personaje estaba por cumplir cincuenta años. Cuando vi que el libro es de 1972 me cayó el veinte —expresión de anciano— de que yo también. 2. Incidentalmente, Morrell bautizó así a su protagonista en honor a Arthur Rimbaud, que junto con Charles Baudelaire fueron mis poetas favoritos de la adolescencia. 3. Rimbaud escribió las Iluminaciones en 1872 (y publicó —chin— Una temporada en el Infierno un año después; por poquito coincidimos). 4. Fue mi profe de biología de la prepa el que me presentó a los poetas malditos a los quince años. Es lo único bueno que me llevé de las escuelas de los maristas. Gracias, Oswalth. 5. La leyenda urbana cuenta que Baudelaire se tiñó el cabello de azul en el París decimonónico, nomás por fastidiar. 6. Baudelaire fue traductor y gran popularizador de Edgar Allan Poe en Francia. 7. En 1984, mi papá me regaló los Cuentos completos de Poe en una edición de Rafael Llopis que me enamoró del gran Loco de Baltimore. 8. También leí 1984 en 1984. 9. En mis años punk me pinté el cabello de azul en honor a Baudelaire. 10. En 1987, The Cure, que debió ser mi banda favorita de la adolescencia, grabó “How Beautiful You Are”, cuya letra está basada en un poema de Baudelaire. 11. Robert Smith no refirió su fuente. 12. Mi banda favorita de la adolescencia fue Mecano. 13. Sigo enamorado de Ana Torroja. 14. Radio Futura, contemporáneos de Mecano, grabaron “Annabel Lee”, de Poe, en una versión hermosa con traducción impecable. 15. Santiago Auserón sí dio crédito a Poe. 16. Nunca he leído las traducciones de Poe que hizo Julio Cortázar. 17. A cambio, las de Raquel Castro y Alberto Chimal me parecen espléndidas. 18. Llegué a Cortázar buscando sus cuentos fantásticos. 19. Me acabé enamorando más de Historias de cronopios y de famas. 20. El propio Chimal dice que no hay quien lea ese libro que no se declare cronopio. 21. Entre más envejezco, más fama me siento y menos cronopio. 22. Cortázar nació el mismo año que William Burroughs. 23. Y que mi abuelo. 24. Alguna vez leí que sólo hay tres escritores punk: Burroughs, J. G. Ballard y Jean Genet. 25. Nunca he podido acabar un libro de Jean Genet. 26. Leí profusamente a Burroughs y Ballard en la universidad. 27. Pero mi escritor favorito de aquellos años y de todos los tiempos es Kurt Vonnegut. 28. Y mujer, Mary W. Shelley. 29. Mi hija mayor se llama María en honor a la mamá de Frankenstein. 30. Yo quería bautizarla Alana en honor a Alan Moore. Su mamá no lo permitió. 31. Cuando leí Watchmen, a los 15 años, decidí que quería ser escritor. 32. “Si esto se puede hacer con las palabras, yo quiero hacerlo”, pensé. 33. Alan Moore quedó tan decepcionado de sus adaptaciones al cine que renegó de ellas y renunció a cualquier regalía producida por versiones audiovisuales de sus cómics. 34. David Cronenberg adaptó tanto a Burroughs como a Ballard al cine. 35. Los dos quedaron encantados, ¿cómo le hubiera ido a Moore en manos del cineasta canadiense? 36. Crash es una de mis novelas favoritas. 37. El almuerzo desnudo no lo es tanto. 38. Dibujé una novela gráfica sobre William Burroughs en México, Uncle Bill. 39. En Shanghái quise visitar la casa natal de Ballard, pero no la encontré. 40. En cambio, di con la calle Qibao, que aparece en la aventura de Tintín El Loto Azul, de Hergé. 41. Y me tomé una foto. 42. Lo que me llevó a China fue escribir Ojos de lagarto, una novela sobre un anciano chino que tiene escondido un dragón que escupe fuego en un sótano de Mexicali, y que se tradujo al mandarín. 43. Lo anterior representa uno de muchos ejemplos de lo afortunado que he sido en estos cincuenta años. 44. Me dedico a lo que quería hacer cuando tenía ocho años: dibujar cómics. 45. Y, además, escribo novelas. 46. Varias de ellas, de ciencia ficción. 47. A mi hija menor la quise bautizar como Harlana, en honor a Harlan Ellison, decano de la ciencia ficción, pero su mamá no me dejó y se llama Sofía en honor de Sofya Kovalevskaya, una matemática polaca. 48. La protagonista de mi próxima novela gráfica será una niña llamada Harlana, basada en mi hija menor, a la que un hada punk le concede tres deseos; por supuesto, todo sale mal. 49. Tengo cincuenta años, igual que El Padrino, de Coppola, pero apenas la vi hace dos meses. 50. ¿Pintarse el cabello de azul como Baudelaire a los cincuenta años será señal de una crisis de la edad? +