Ali Hazelwood, la nueva estrella de la comedia romántica

Ali Hazelwood, la nueva estrella de la comedia romántica

Brenda Ríos

Una escritora italiana con un doctorado en neurociencia escribe novelas de amor: exitosas comedias románticas, debemos decir. Su primera novela, The Love Hypothesis (Random House, 2021) fue un éxito de ventas del New York Times. Se publicó en 2021 y va por la edición 88. Ese mismo año, la obra fue nominada como mejor novela. La carrera de esta autora, en muy breve tiempo, ha sido meteórica. 

Ali vivió en Japón antes de mudarse a Estados Unidos, donde radica actualmente. Ama la Nutella, hacerse una cola de caballo y a los gatos. Así se presenta ella misma. Su éxito se debe quizá a que sus personajes, casi todos, son femeninos en contextos bastante particulares: la academia y cubículos de estudio, particularmente asociados con ciencia, ingeniería y matemáticas.

Hazelwood es como una Jane Austen de nuestro tiempo. Mientras en la Inglaterra de los siglos xviii y xix las mujeres tenían como objetivo social, político y económico el matrimonio, con la autora italoestadounidense el asunto va por otro lado: representa una combinación acertada de la inclusión de las mujeres en un ámbito tradicionalmente dominado por hombres, la ciencia y la academia científica, y su éxito radica en el impacto tremendo que logra a través de redes sociales. TikTok tiene mucho que ver con ese público juvenil que se encandila con historias sencillas y atractivas, quizá tradicionales en el mejor sentido de la palabra: chico y chica se atraen, pero no se dan cuenta por estar absortos en sus carreras; aprenden a reconocer lo que sienten; enfrentan problemas, y, para dar la vuelta de tuerca, no siempre terminan juntos. Lo que aprenden en esa historia amorosa es lo relevante. Ahí radica quizá la magia de su impacto. 

Love on the Brain (Random House, 2022) y Love, Theoretically (Random House, 2023) son las novelas que siguieron a The Love Hypothesis. En esta obra, como su nombre lo dice, una científica emprende la tarea de comprobar su teoría. La sinopsis la anuncia de esta forma:

Una relación falsa entre dos científicos se topa con la irresistible fuerza de la atracción. Olive Smith es una doctoranda de tercer año que no cree en las relaciones amorosas duraderas, pero su mejor amiga, Ahn, sí, y por eso Olive se ha metido en un lío monumental. A Ahn le gusta el exnovio de Olive, pero jamás daría el primer paso porque es una buena amiga. Convencerla de que ha pasado página y de que está construyendo su “fueron felices y comieron perdices” no va a resultarle nada fácil a Olive, puesto que los científicos necesitan pruebas. Por eso, como cualquier mujer con un mínimo de amor propio, se deja llevar por el pánico y besa al primer hombre con el que se encuentra para que Ahn la vea. Ese hombre es nada más y nada menos que Adam Carlsen, un joven profesor tan reputado por la calidad de su trabajo como por su imbecilidad. Así que Olive se queda de piedra cuando Carlsen accede a mantener su farsa en secreto y ser su novio falso.

La novela más reciente de Hazelwood es Check and Mate (Random House, 2023), en la que hay una clara referencia al ajedrez. Los personajes de la autora, en contraposición con los personajes clásicos de comedias románticas, no son las típicas chicas hermosas medio bobas que sólo quieren enamorarse, y sí, casarse (porque de algún modo sigue vigente ese cuento de hadas que bien conocía Austen: matrimonio es igual a felicidad eterna); son chicas nerdies, demasiado extrañas, que seguro fueron molestadas de niñas y que logran, gracias a su tenacidad y esfuerzo, tremendas hazañas: son investigadoras, matemáticas, científicas que viven para ellas mismas, hasta que, sí, llega el amor en forma de experimentación y autoconocimiento. ¿Quién no se va a identificar con estas heroínas tan seguras de lo que hacen y saben, pero torpes cuando se trata de “saber” qué “sienten”?

Es curioso que mi trayectoria como física y mi trayectoria como persona dedicada a complacer a la gente empezaran al mismo tiempo. Podría trazar una línea recta desde el primer concepto de mecánica cuántica que aprendí hasta mi trabajo actual. Bueno, en realidad, hasta mis dos trabajos actuales. El diurno, en el que cobro prácticamente nada por elaborar teorías de física que explican por qué las moléculas pequeñas se agrupan como si fueran un grupito de chicas malas en el recreo. Y el otro, en el que… Bueno. En el que finjo ser quien no soy, pero al menos me pagan bien.

Esto relata la protagonista Elsie, de Love, Theoretically. Esta chica está a punto de obtener una plaza como profesora en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT). Trabaja como profesora adjunta y enseña termodinámica. Y claro, como todas sus heroínas, vive una vida apresurada y concentrada hasta que llega el dichoso galán. Esperado pero odiado. 

La neoyorquina por excelencia, reina de la comedia romántica, Nora Ephron, era una intelectual, culta, de origen judío, que no se dejó vencer por ser una autora taquillera, aunque fuera acusada de ser “poco seria” por dedicarse al romance, muy exitoso, por cierto, y podemos ver ahí un modelo a seguir para que varias autoras jóvenes usen el tema del amor para hablar de otros factores. En este caso, Hazelwood, sin declararse feminista ni volver feministas a sus personajes, pone en jaque el tremendo esfuerzo que significa para las mujeres hacerse un lugar en el medio académico y científico para tener las mismas oportunidades que los hombres. Y qué mejor que usar el eterno, difícil cortejo para hablar de eso y de la comunicación entre pares: la confusión amorosa, la falta de madurez de los adultos sin importar su edad. El amor, como la ciencia —asegura— debe ser probado. +