Sonautas, un viaje donde el sonido se vuelve memoria

Sonautas, un viaje donde el sonido se vuelve memoria

Hay libros que no solo se leen: se escuchan, se sienten, vibran en algún rincón del cuerpo que no sabíamos que existía. Sonautas, de José Luis Salazar Hernández, es uno de ellos. Una novela que pulsa como una canción favorita al borde del insomnio, donde cada palabra parece tener su propia frecuencia.

El protagonista —un chico de 17 años que vive con un zumbido perpetuo en los oídos— no es solo un adolescente tratando de entender el mundo. Es también un médium del sonido, un habitante de esa dimensión invisible que existe entre el ruido y el silencio, entre lo que recordamos y lo que quisiéramos olvidar. A través de iPods, Discman y fragmentos de diario, nos arrastra a un universo íntimo donde la música no solo acompaña: sana, nombra, arde y también consuela.

Tuvimos el placer de entrevistar a su autor, José Luis Salazar Hernández, quien compartió con nosotros su entusiasmo por el libro y nos habló sobre el proceso detrás de esta historia. Su voz, como la novela, está atravesada por la sensibilidad, el ritmo y una mirada profundamente humana.

Ganadora del Premio de Novela Juvenil “Universo de Letras”, Sonautas no teme adentrarse en territorios sensibles: la pérdida, la ansiedad, la incomunicación, el deseo de desaparecer. Pero lo hace sin dramatismos: lo hace con belleza, con humor agridulce, con esa delicadeza con la que solo se puede hablar cuando se ha tocado fondo y se ha decidido, de todos modos, seguir adelante.

Sonautas no es solo una historia sobre crecer: es una sinfonía emocional sobre el cuerpo que cambia, la mente que duda y el alma que busca algo que no siempre tiene nombre. Es un eco que persiste, incluso después de cerrar el libro.