TV UNAM: 40 años de una mirada universitaria sobre la televisión mexicana
En 2025, TV UNAM cumple cuarenta años de existencia. Cuatro décadas de imágenes, voces y debates que han acompañado la vida intelectual, política y cultural del país, fiel a su vocación universitaria: difundir el conocimiento y la reflexión crítica más allá de las aulas. En tiempos donde la inmediatez domina la pantalla, celebrar los 40 años del canal universitario es también reconocer un proyecto que ha sabido resistir, reinventarse y permanecer como un referente de la televisión pública en México.
Esa historia, compleja y fascinante, está ahora recogida en la obra Televisión universitaria, dividida en dos tomos:
- Tomo I: La UNAM y la TV: 1950-1984
- Tomo II: La UNAM y la TV: 1985-2023
Ambos volúmenes, escritos por Magdalena Acosta Urquidi y Federico Dávalos Orozco, rescatan un capítulo poco explorado de la historia cultural mexicana: el vínculo entre la Universidad Nacional Autónoma de México y la televisión, desde los primeros experimentos universitarios en la década de 1950 hasta la consolidación de un canal propio, con identidad y autonomía.
Los orígenes: la televisión como herramienta educativa
La historia comienza mucho antes de la fundación formal de TV UNAM. Desde la llegada de la televisión comercial a México, en 1950, la UNAM reconoció su potencial didáctico. La televisión era vista como un medio revolucionario, capaz de llevar la cultura, la ciencia y la orientación vocacional a todos los rincones del país.
El Tomo I del libro, que abarca de 1950 a 1984, documenta con detalle los primeros intentos de la Universidad por vincularse con este nuevo medio. En aquellos años, la institución produjo programas educativos y culturales en colaboración con otros canales, al tiempo que reflexionaba sobre el papel que debía desempeñar en el espacio mediático. Sin embargo, la falta de recursos y una política cultural a menudo incierta hicieron que el sueño de una televisión universitaria autónoma tardara décadas en concretarse.
Un proyecto con vocación universitaria
A pesar de las dificultades —carencias financieras, equívocos burocráticos y tensiones entre la política cultural y la vida universitaria—, la UNAM mantuvo viva la idea de contar con un canal propio. En el contexto de los años setenta y ochenta, con una comunidad estudiantil en crecimiento y un país en transformación, surgió la convicción de que era necesario construir una televisión con mirada crítica, comprometida con la ciencia, el arte y el pensamiento libre.
Esa convicción se materializó en 1985, cuando nació formalmente TV UNAM. Desde entonces, el canal ha sido un laboratorio audiovisual donde convergen la educación, la divulgación científica, el cine, la literatura y el debate social. A diferencia de la televisión comercial, TV UNAM no busca el espectáculo ni la rentabilidad: su misión es difundir el conocimiento y fomentar la reflexión, en consonancia con los principios de la autonomía universitaria.
Del archivo a la memoria viva
El Tomo II de Televisión universitaria, que abarca de 1985 a 2023, reconstruye ese proceso de consolidación y crecimiento. A través de documentos, archivos, programas emblemáticos y testimonios, Acosta y Dávalos relatan cómo la UNAM logró crear una infraestructura técnica y humana que le permitió alcanzar la autosuficiencia en producción y difusión.
El resultado ha sido un canal con presencia en múltiples plataformas tecnológicas, reconocido por su calidad, pluralidad y rigor. TV UNAM se ha convertido en un espacio donde la cultura y la ciencia dialogan con la sociedad mexicana y donde la televisión, lejos de ser un mero entretenimiento, recupera su sentido formativo y reflexivo.
Los autores: una vida dedicada al cine y la televisión
La obra es también el testimonio de dos trayectorias académicas y profesionales profundamente ligadas al audiovisual universitario.
Magdalena Acosta Urquidi, licenciada en Cinematografía por el CCC y maestra en Arte por el ICH, ha dedicado su vida a la docencia y a la gestión cultural. Durante 30 años fue profesora en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, donde publicó junto con Dávalos la primera edición de Televisión universitaria: La UNAM y la Televisión 1950-1984 en 1986. Su experiencia abarca la dirección de instituciones clave del panorama audiovisual mexicano: el Canal Once, la Cineteca Nacional, Canal 22 y el Canal Judicial.
Por su parte, Federico Dávalos Orozco, doctor en Ciencias Políticas y Sociales por la UNAM, ha sido académico e investigador del Centro de Estudios en Ciencias de la Comunicación de la FCPyS. Sus líneas de investigación —la historia del cine mexicano, las industrias culturales y los acervos audiovisuales— lo han convertido en un referente en el estudio de la relación entre medios, cultura y sociedad.
Cuarenta años de pantallas abiertas
Celebrar los 40 años de TV UNAM es, en el fondo, celebrar el poder del conocimiento transmitido por imágenes. El canal ha acompañado momentos cruciales de la historia reciente del país: los movimientos sociales, los cambios políticos, la expansión de las ciencias y las artes, y los debates sobre el futuro de la educación y la cultura en México.
Desde sus inicios, ha ofrecido una programación que desafía la lógica del mercado televisivo. Ha abierto espacio a cineastas independientes, escritores, científicos, artistas y pensadores; ha documentado el quehacer universitario y ha llevado a la pantalla los grandes temas que marcan nuestra época: la memoria, la democracia, los derechos humanos, el medio ambiente, la igualdad y la diversidad.
Una televisión con propósito
En una era dominada por los algoritmos y la sobreoferta digital, TV UNAM continúa defendiendo una idea esencial: la televisión puede ser también un espacio de pensamiento. La obra Televisión universitaria no solo rescata la historia de un canal, sino que reafirma el papel de la UNAM como faro cultural y educativo del país.
Cuatro décadas después de su fundación, TV UNAM sigue siendo una invitación a mirar —y a pensar— desde la universidad hacia el mundo.
