El libro versus la peli presenta… Fiesta en la madriguera

El libro versus la peli presenta… Fiesta en la madriguera

En 2010, Anagrama publicó la primera novela de un recién estrenado narrador: Juan Pablo Villalobos. Fiesta en la madriguera es una novela muy breve y que resalta por su autenticidad respecto de otras obras que tratan el tema del narcotráfico en México. El narrador es Tochtli, un niño hijo de un narcotraficante muy poderoso: Youcault. La inocencia y el humor del estilo con el que Tochtli relata su cotidianidad contrasta con las atrocidades que se dejan entrever, y que tan bien conocemos fuera de la ficción: violencia, corrupción, un machismo rampante. Sin embargo, lo increíble de la novela reside en la complejidad que resulta de esta mezcla: un pequeño aprendiendo del mundo, encerrado en su mansión, en la que se cumplen todos sus deseos; un niño profundamente amado por su padre, aunque éste sea un criminal.

Pero Tochtli no es un niño nada convencional: a la manera de un príncipe antiguo, recibe clases particulares de Mazatzin, un profesor con amplia cultura, sensibilidad y sus propias ideas antitiránicas, que producen en Tochtli una transformación silenciosa, evidente sólo después de pasar por la propia voluntad del niño, acostumbrado a que se le escuche con atención. Tochtli está especialmente interesado en los animales raros, las palabras difíciles, la Revolución francesa, indicios de geopolítica y su enorme colección de sombreros. Muy pronto, la novela gira en torno a uno de los deseos más urgentes de Tochtli: un hipopótamo enano de Liberia. Youcault, Mazatzin y Tochtli terminan viajando a África en busca de ellos, pero también en un intento por escapar del peligro de que el narcotraficante termine atrapado. Esta novela aborda la infancia, la paternidad, el poder y los deseos con un estilo maravilloso: la sencillez y contundencia de la voz de un niño.

Recién estrenada en el catálogo de Netflix, la película basada en esta novela llegó este mes para contarnos la misma historia desde otro soporte, que, obviamente, le da nuevos matices. La película Fiesta en la madriguera fue dirigida por Manolo Caro, con un guion de Nicolás Giacobone y el acompañamiento del propio Juan Pablo Villalobos. Conserva esa mezcla de suspenso, humor, oscuridad y ternura.

Las actuaciones de Miguel Valverde (Tochtli), Manuel García-Rulfo (Youcault) y Raúl Briones (Mazatzin) reinterpretan de manera precisa el momento en el que el niño comienza a cuestionarse acerca de su realidad: ¿qué hacer realmente su padre?, ¿cómo es que tiene tanto poder? (“Youcault siempre puede” es la frase que se repite constantemente) y ¿qué oculta? 

Si bien, mediante las palabras, el libro nos emociona con la gracia de un chico libresco e inocente que determina su realidad mediante los pocos adjetivos que conoce gracias al diccionario que lee todas las noches: patético, nefasto, sórdido; en la película podemos notar esa misma candidez tomada en serio gracias al vestuario: Tochtli viste de príncipe, de ninja, de detective y de explorador. La banda sonora también es un aspecto a destacar del filme, que contextualiza el espacio extravagante de esa mansión/madriguera. 

Sin duda, ambos formatos tienen su encanto y coinciden en que ofrecen una perspectiva diferente, amplia y compleja de la configuración del narcotráfico en México, esta vez, mostrando la crianza de aquellos niños hijos de capos; diversos tipos de masculinidades enfrentadas (la constante acusación de ser “marica” y la exigencia de ser “macho”); el poder económico del crimen que se impone sobre el poder político, y la relación entre padres e hijos, incluso cuando las verdades y la lealtad se ponen en una encrucijada. +