Una historia sobre reconstruirnos: Robot dreams
¿Ya vieron la peli Robot dreams? Esta historia, dirigida por Pablo Berger y nominada a Mejor Animación en los Premios Óscar 2023, nos emocionó con el tratamiento complejo de distintas emociones, desde la amistad, la ternura y la complicidad hasta la soledad, la nostalgia y la capacidad de reconstruirnos, a través de una animación colorida y muda.
Robot Dreams está basada en la novela gráfica homónima de la autora estadounidense Sara Varon. Ambas producciones cuentan la historia de Dog, un perro que se siente extremadamente solo en su departamento de Manhattan, así que decide adquirir un robot de compañía. La vida de Dog está marcada por el vacío: su cena consiste en platos precocinados que calienta en el microondas; pasa el tiempo armando rompecabezas o viendo televisión, y observa cómo otros animales de la ciudad tienen vínculos significativos.
Todo cambia cuando Robot llega a la vida de Dog. La química entre ambos se desata desde el principio: por fin tienen un compañero de aventuras, musicalizadas por “September”, de Earth, Wind and Fire. Sin embargo, la trama de la peli se transforma cuando Robot se descompone en la playa y resulta imposible para Dog moverlo de la arena, por lo que tiene que abandonarlo durante meses.
En ese lapso, los espectadores presenciamos un sinfín de estados emocionales en ambos personajes: la tristeza, la esperanza, la búsqueda de nuevos vínculos y, sobre todo, la reconstrucción de su vida, que también implica nuevos vínculos. Robot, literalmente, debe cambiar piezas que va perdiendo: una metáfora de cómo en el camino todos terminamos modificando partes de nosotros que alguna vez creímos inamovibles.
Otros aspectos increíbles de la película consisten en la diversidad de animales (antropomorfos) que habitan la ciudad: hay fauna de todo tipo y tamaño, que relata muy bien la multiculturalidad real de Manhattan y de todas las ciudades. También está la sutileza emocional de las pequeñas historias que se entretejen en el filme: las aves que hacen su nido en Robot, los sueños de ambos personajes, los cortes en la pantalla que muestra cómo cada uno habita el mundo.
Robot dreams resulta disfrutable y conmovedora para infancias y personas adultas por igual. Pero, eso sí, si son muy sensibles, prepárense para llorar por la belleza, la bondad y la comprensión que encontrarán en esta peli.+
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