“La bondad”, una novela de Drusila Torres Zúñiga
¿Por qué una novela acerca de una familia disfuncional de un barrio de Ciudad de México se llama La bondad? El inicio de la obra se sitúa en la década de 1950, cuando Carmelina queda embarazada a los 16 años, sin apoyo del padre de su bebé, y decide ocultar su estado a su familia. Este “error” fundacional (que en realidad habla de la crisis de paternidades responsables y de educación sexual en nuestro país desde tiempos inmemoriales) desencadena el nacimiento de la estirpe de los Zurita: una familia conflictiva, cuya fama recaerá en todos los miembros, por más que se esfuercen.
Para responder a la pregunta inicial, esta novela profunda y compleja se titula como la colonia popular en la que los Zurita se desarrollan: La bondad. El contexto de la familia resulta fundamental para el desarrollo de los personajes, que parecen condenados por el determinismo. Pero esta novela también nos ofrece una ventana a los “chismes” clásicos de todas las familias mexicanas (y quizá universales): entrar y salir de prisión, tener hijos a corta edad, vivir infidelidades e inestabilidad con la pareja… Estas tragedias personales parecen no tener fin y, aunque algunos personajes se resistan, su lealtad hacia su familia les arrastra hacia el mismo destino.
La bondad es el resultado de un excelente proyecto para publicar a nuevas voces narrativas: el Programa de Tutoría en Novela, instaurado hace tres años por la Dirección de Literatura y Fomento a la Lectura de la UNAM. Los tutores, Jorge Volpi, Eloy Urroz y Pedro Ángel Palou, seleccionaron la obra de Drusila Torres Zúñiga como la mejor propuesta para ser publicada en 2023. El comité a cargo de la evaluación fue integrado por Guadalupe Alonso, directora de la Casa Universitaria del Libro; Socorro Venegas, directora de Libros UNAM, y Jorge Volpi, titular de la sede de la UNAM en España.
De algo estamos seguros: cuando empieces a leer La bondad no vas a querer soltarlo. Se trata de una novela escrita con esmero y cuya trama cuenta con los puntos de tensión exactos para que los lectores queramos saber más. Además de que, inevitablemente, nos refleja tanto en la tragedia como en la ternura, presentes en la narración.
Ocultó el embarazo ante los ojos de sus padres. Ajustó vendas alrededor del estómago para disimular el crecimiento de la barriga. Comenzó a vestir con blusas amplias. Cuando la sorprendían las náuseas, volteaba discretamente para un lado y se tragaba el nudo de saliva. Comía poco frente a los demás, pero cuando no había nadie en casa o mientras trabajaba con doña Jovita, devoraba sin discreción: frutas con crema, trozos de pollo frito, un café con leche con mucha azúcar, una quesadilla doradita, dos tazas de atole para pasar el bocado. Aunque lo intentó, no pudo detener el aumento de peso ni agrandar la ropa que ya no le ajustaba.
¿Quieres saber más de esta novela? En conversación con José Luis Trueba Lara, Drusila Torres Zúñiga nos contó cómo fue su proceso creativo y dónde puedes conseguir La bondad.
