Concha Méndez, un corazón nuevo, rebelde y poeta
Concepción Méndez Cuesta, escritora, poeta, autora de teatro y guionista. Con un estilo directo y sincero. Nació un 17 de julio de 1898 en Madrid, España. Concha Méndez era la novia de Luis Buñuel, la esposa de Manuel Altolaguirre o la gran amiga de Luis Cernuda.
Autora de Inquietudes, Surtidor, Entre el soñar y el vivir o Niño y sombras. También escribió teatro infantil como El carbón y la rosa. Poco se conoció de su labor como impresora junto a su marido. Ambos imprimieron revistas de la época como Héroe en Madrid o 1616 en Londres, además de fundar la imprenta La Verónica en Cuba.
Concha Méndez dedicó poemas en su libro Canciones de mar y tierra 1930 a Maruja Mallo, Rosa Chacel y Carmen Conde. Protagonista de un escándalo en su época por atreverse a viajar sola.
«Nací en medio de la modernidad, del canto a los medios de transporte, a la velocidad, al vuelo. Mis primeros poemas están llenos de estas cosas: de los clamores a la era moderna, de aviadores, aviones, motores, hélices, telecomunicaciones», cuenta la poeta en sus Memorias habladas, memorias armadas, escritó por su nieta Paloma y publicado en 1990.
El 5 de junio de 1932, se casó con Altolaguirre vestidos de verde con un ramo de perejil. Un recuerdo: «Al salir de la iglesia, Juan Ramón empezó a aventar monedas a los niños de la calle y, según iba tirando el dinero, les decía: “Digan conmigo: ¡Viva la poesía! ¡Viva el arte!”».
Formó parte de las mujeres de la Generación del 27, también llamadas Las Sinsombrero. Un grupo de pintoras, poetas, novelistas, escultoras e ilustradoras, artistas que con sus trabajos y activismo trataron de cambiar la concepción y las normas existentes en España durante los años 20 y 30.
La Puerta del Sol de Madrid fue testigo en los años 20 de cómo Margarita Manso y Maruja Mallo fueron apedreadas por pasear sin sombrero en una época donde los hombres y mujeres que no llevaban puesta dicha prenda, representaban un acto transgresor, como rebeldía, homosexualidad, así, con este acto nueve jóvenes españolas pretendían romper las normas.
“Al nacer cada mañana me pongo un corazón nuevo”.
Falleció el 28 de diciembre de 1986, exiliada en la Ciudad de México. +