Lista: Antidecálogo del Escritor

"Jorge Luis Borges siempre cuidó que no le sobrevivieran sus borradores, para que el investigador no viera los pasos previos, las vacilaciones, y únicamente pudiera comparar la primera publicación con las sucesivas. Nos entregó sus textos cuidados con esmero, y así, a muchos les enseñó a escribir –a romper el tiempo diegético, a jugar con lo universal y lo individual– pero nunca les enseñó cómo escribía.

En tanto, Adolfo Bioy Casares, en un número especial de la revista francesa L’Herne, cuenta que, hace 30 años, Borges, él mismo y Silvina Ocampo proyectaron escribir a seis manos un relato ambientando en Francia y cuyo protagonista hubiera sido un joven escritor de provincias. El relato nunca fue escrito, pero de aquel esbozo ha quedado algo que pertenece al propio Borges: una irónica lista de 16 consejos acerca de lo que un escritor no debe poner nunca en sus libros. Y aunque a todas luces irónica, esta lista deja entrever el genial sentido del humor del autor y hace gala de su placer por poner en controversia tesis y antítesis, afirmación y negación.

Es por ello que al momento de escribir, es momento de evitar:
 

1. Las interpretaciones demasiado inconformistas de obras o de personajes famosos. Por ejemplo, describir la misoginia de Don Juan, etc.

2. Las parejas de personajes groseramente disímiles o contradictorios, como por ejemplo Don Quijote y Sancho Panza, Sherlock Holmes y Watson.

3. La costumbre de caracterizar a los personajes por sus manías, como hace, por ejemplo, Dickens.

4. En el desarrollo de la trama, el recurso a juegos extravagantes con el tiempo o con el espacio, como hacen Faulkner, Borges y Bioy Casares.

5. En las poesías, situaciones o personajes con los que pueda identificarse el lector.

6. Los personajes susceptibles de convertirse en mitos.

7. Las frases, la escenas intencionadamente ligadas a determinado lugar o a determinada época; o sea, el ambiente local.

8. La enumeración caótica.

9. Las metáforas en general, y en particular las metáforas visuales. Más concretamente aún, las metáforas agrícolas, navales o bancarias. Ejemplo absolutamente desaconsejable: Proust.

10. El antropomorfismo.

11. La confección de novelas cuya trama argumental recuerde la de otro libro. Por ejemplo, el Ulysses de Joyce y la Odisea de Homero.

12. Escribir libros que parezcan menús, álbumes, itinerarios o conciertos.

13. Todo aquello que pueda ser ilustrado. Todo lo que pueda sugerir la idea de ser convertido en una película.

14. En los ensayos críticos, toda referencia histórica o biográfica. Evitar siempre las alusiones a la personalidad o a la vida privada de los autores estudiados. Sobre todo, evitar el psicoanálisis.

15. Las escenas domésticas en las novelas policíacas; las escenas dramáticas en los diálogos filosóficos. Y, en fin:

16. Evitar la vanidad, la modestia, la pederastia, la ausencia de pederastia, el suicidio."

 

Fuente: "16 consejos para escribir, de Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares" en Faena Aleph (página web).

 

MasCultura 1°-dic-2016