Malas compañías de Facundo Cabral

El 22 de mayo de 1937 nació un niño en Buenos Aires que, a los breves 9 años, salió de su casa en busca de trabajo y, pocos meses después, regresó en avión con un empleo para su madre otorgado por el mismísimo presidente. Ese niño se llamaba Facundo Cabral.

Aunque sus primeras grabaciones no tuvieron tanto éxito, en 1970, grabó ‘No soy de aquí ni soy de allá’, tema que lo catapultó al éxito. A partir de entonces, empezó a ser conocido alrededor del mundo, cantó en nueve idiomas y se convirtió en uno de los cantautores latinoamericanos más queridos.

El cantautor argentino frecuentó a Henry Fariñas, empresario que llegó a gestionar varias de las presentaciones de Cabral. La última que realizó en Guatemala también la gestionó su amigo Fariñas. La mañana del atentado, las balas que asesinaron al músico iban hacia el empresario: una venganza cuyas raíces trastocaban los intereses de narcotraficantes. La persona que lo condenó llevaba un tiempo en ciertos negocios ilícitos: tráfico de drogas y lavado de dinero.

La mala compañía se esfumó para siempre el 9 de julio de 2011; asimismo lo hizo en persona Facundo Cabral, pero no su voz ni su recuerdo, al que evocamos con su música todo el tiempo.