El espectáculo debe continuar: TIERRA DE CAIMANES, de Karen Russell

La pérdida de un ser querido es irreparable. Siempre deja un vacío y la edad no es excusa para impedir la muerte. Todos estamos igualmente expuestos al final en cualquier momento de la vida. ¿No se han enfrentado contra algún cataclismo que les haga pensar que eso es lo último que verán? Quizá un accidente, una enfermedad o una mala jugada del destino o el azar. Las muertes absurdas son las que más sorprenden, como la de Miguel Deverne en Los enamoramientos, de Javier Marías; las que aparecen en el listado sinfín de Mil maneras de morir o la muerte de Hilola Bigtree en la novela Tierra de caimanes, de la prestigiosa Karen Russell elegida por la revista Granta como una de las mejoras escritoras jóvenes norteamericanas.

Swamplandia! es un parque cuya atracción principal es arriesgar la vida en una fosa llena de caimanes. La familia Bigtree gozó de gran reconocimiento entre los paraderos turísticos con su asombroso show de encarar la muerte. Abrirle las fauces, colocarse frente a ella y salir victorioso del otro lado del estanque. Hilola Bigtree era quien la retaba en cada espectáculo. Sin embargo, se burló tantas veces de ella, que, al final, le cobró una factura mucho más elevada. Un giro y una mala broma del destino. Hilola Bigtree murió de cáncer a los 36 años. No fue devorada por uno de sus caimanes, la muerte ya la traía dentro.

Ava, la hija menor de la familia, cuenta la historia de la decadencia de la dinastía Bigtree. La paulatina separación y fragmentación del clan. Después de la muerte de su madre, Ava es testigo de cómo su hermana Ossie se comienza a adentrar en el mundo espiritista. Su hermano Kiwi, obstinado con la idea de irse a tierra firme y abandonar la isla donde viven, se enfrenta al repudio de su padre, El Jefe, hacia toda la cultura proveniente de aquel lugar, sobre todo, hacia su nuevo enemigo, el parque Universo Oscuro.

La novela de Karen Russell es un viaje a un mundo que, de alguna manera, forma parte del nuestro. Es experimentar la soledad y la fortaleza que muchas veces es evocada por aquélla. Estar en esta situación de paulatino aislamiento es no sólo enfrentarse a uno mismo, sino al amenazante mundo que nos rodea en cada segundo. Acaso ¿no siempre es más fácil y más motivador encarar las peripecias del universo al lado de alguien? Sea quien sea, la familia o los amigos. Sin embargo, hay momento en los que no hay nadie o tan sólo pareciera eso, como cuando Ava ve alejarse a su hermana para encontrarse con su amor fantasmal, mientras que la pequeña se queda rodeada de árboles y una constante oscuridad.

Tierra de caimanes expone la desgracia del clan Bigtree, quienes se dejaron llevar por la caída libre que representó la muerte de Hilola. Se enfrentaron al abismo y se perdieron en él, tal y como su acérrimo enemigo: un Universo Oscuro los devoró antes que un caimán. A pesar de ello, el espectáculo, o la vida, que al fin y al cabo, aquí se difuminan sus límites, debe continuar.

Por Rolando Ramiro Vázquez Mendoza

Imagen: Portada del libro Tierra de caimanes, de Karen Russell.
Mascultura 10-Abr-13