UNA VIDA EJEMPLAR: El arte de Art Pepper

En mi opinión hay un fundamento indispensable del buen jazz, un principio casi palpable que da densidad a la interpretación de un músico cuando ha alcanzado la plena madurez de su estilo; y decir palpable es exacto: puede sentirse –escucharse– cuando se ha conquistado ese sencillo y al mismo tiempo arduo principio que consiste en tocar serenamente, a placer y gozando cada nota producida. Esto origina un sonido único e íntimamente propio como el que desarrolló Art Pepper, el saxo alto más desatacado en la historia del instrumento luego del monstruo que se llamó Charlie Parker.

En 1979 Schirmer Books publicó un grueso volumen con las memorias de Pepper titulado Straight Life: The Story of Art Pepper, la transcripción de una serie de grabaciones que Laurie Pepper, su última esposa, realizó casi al final de la vida del jazzista. Más de treinta años después y gracias a Global Rhythm nos llega Una vida ejemplar, imperdible edición castellana de esta autobiografía que –como las mejores– resulta un adictivo coctel de curiosidad y admiración por el personaje que abre sin reservas ni decoro, con la brutal insolencia de la honestidad más absoluta, los detalles de su vida. Porque más allá del inevitable voyerismo que despierta toda autobiografía, en Una vida ejemplar resalta la autenticidad de la voz de Pepper, sin alardes ni autocompasión, fiel a sus contradicciones –que es lo mismo a decir fiel a su humanidad–. Estaba convencido, por ejemplo, de que la música y el arte (para él la belleza), se producen mejor cuando hay bondad y armonía entre los seres, pero lo habitaban también tentaciones criminales, la ruindad de la venganza y ni una ni otra de sus facetas aparecen nunca maquilladas. Ni engrandece sus virtudes ni edulcora sus negruras.

Quizá por eso Óscar Wilde sugería llevar el diario de otro y no el de uno mismo, pues pocas tareas hay más difíciles que juzgar la propia vida. Pepper narra su adicción al alcohol y a la heroína, sus repetidos ingresos a la cárcel, la lucha contra sus demonios y su abandono a ellos con la misma intensidad que imprime a su música, aunque habremos de decir que si se alterna la lectura de Una vida ejemplar con la reproducción de las interpretaciones de Pepper no puede dejar de apreciarse cierta contradicción entre el aterciopelado sonido que logra, la fluidez envolvente y tersa en la que es tan fácil dejarse ir, y el desconsuelo que se percibe en cada palabra del hombre. También comprendemos entonces cuán verdaderamente nos habla cuando dice que sólo en la droga encontró la misma sensación de paz y de serenidad que tenía al tocar.

Una vida ejemplar vale de sobra por plantarnos frente a la biografía de Art Pepper, dejarnos comprender al músico mirándole las entrañas; es además –y de primera mano– un recuento del jazz estadounidense de las décadas de 1940 y 1980, de la vida de sus músicos y la metamorfosis de su cultura. Todo aquel que guste de los libros sobre música, convertirá muy pronto a éste en su favorito.

Por Paola Velasco

Imagen: Portada del libro Una vida ejemplar, de Art y Laurie Pepper.
Mascultura 11-Abr-13