Raúl Aníbal Sánchez es un escritor mexicano, dentro de sus obras se encuentran los libros de cuento Luna de día (2011), La comida está en el congelador(2013), El genio de la familia (2014), así como el libro de poesías Los dones subterráneos (2016). Además, es coautor, junto a Daniel Espartaco Sánchez, de la novela La muerte del pelícano (2014). Su más reciente publicación es Matagatos (2017), novela que se desarrolla en una comunidad al norte del país, en una época desesperanzadora para la ciudadanía mexicana. Los crímenes van en acenso, y por el contrario, las oportunidades para una estabilidad económica van en descenso.
Gilberto, un perturbado y extraño ex-policía
Gilberto es un policía retirado que vive con su madre en una casa de interés social ubicada en Chihuahua. También es un hombre con un pasado turbulento que lo ha marcado; su vida ha estado plagada de abusos desde que era niño. Ahora que es adulto, tiene aficiones cuestionables y perturbadoras; maltrata y asesina gatos que luego se dedica a colgar en la barda de su casa. Sin embargo, los vecinos nunca se han quejado, por mucho que les incomoda su comportamiento malicioso. Pero pronto podría ocurrir algo que los haga arrepentirse de haber desentendido una actitud tan nociva en este peculiar vecino.
Debido a sus actividades y aspecto físico, los vecinos más jóvenes tratan de evitarlo, como es el caso de Javier, Francisco y Adán, que sin embargo en ciertas ocasiones han accedido a sus constantes invitaciones a su casa para jugar con sus videojuegos.
Precisamente estos tres amigos, quienes se encuentran en la adolescencia, son los otros protagonistas de esta historia. Cada uno de ellos tiene sus propios problemas familiares, como la muerte prematura de un hermano o el abandono de una madre y desatención de los demás miembros de la familia. Es así que, a través de ellos se tocan temas como la amistad, la manipulación, el sexo, el abandono familiar o las inquietudes adolescentes.
Contada por un narrador omnipresente, y en ocasiones por uno de los personajes, la historia comienza con un suceso trágico acontecido en un estado fronterizo del territorio mexicano, del cual se conocerá poco a poco a los implicados, y en particular la forma de pensar del victimario. Si bien desde un principio se sabe quién es la víctima, y se sobreentiende quién es el victimario, no será sino hasta el final que se logrará tener una idea más clara de lo sucedido.
La temporalización anacrónica será un elemento importante para entender y conocer lo que se plantea en un comienzo. A través de los saltos en el tiempo se podrán explicar los sucesos antecesores y posteriores más relevantes al planteamiento inicial.