Los premios Nobel no dejan de estar rodeados de polémica. La categoría del premio de la paz ha sido el que más años de suspensión ha sumado a lo largo de la historia del Nobel; los conflictos bélicos e indecisiones son algunas de las causas que han retrasado la entrega. No obstante, en los últimos años no ha existido contrariedad alguna. ¿Ya conoces estos Nobel de la Paz? Te invitamos a que los leas.
Alfonso García Robles (México, 1911 – 1991) fue una de las cabezas del Tratado de Tlatelolco, un tratado internacional que consiste en mantener desnuclearizado el territorio de América Latina y el Caribe. Fue impulsado por el ex presidente Adolfo López Mateos posterior al descubrimiento de misiles soviéticos en Cuba, por parte de las autoridades estadounidenses. Las negociaciones duraron varios años, pero finalmente en 1967 se firmó el tratado en la Ciudad de México. Este trabajo lo consagraría en 1982, junto con la sueca Alva Reimer Myrdal, para obtener el Premio Nobel de la Paz.
La Unión Europea es una de las diecinueve organizaciones internacionales que ha sido reconocida con el Premio Nobel de la Paz. Este organismo que aglutinaba a varios países delo viejo continente fue condecorado en 2013. Su candidatura y nombramiento fueron muy criticados por los diversos conflictos sociales y políticos que se desataron en Europa en los primeros años del siglo XXI. Ahora, con la reciente salida del Reino Unido de la UE podríamos estar presenciando el inicio de fragmentación de este organismo.
Malala Yousafzai (Pakistán, 1997) ha sido, en la historia del Premio Nobel en cualquiera de sus categorías, la mujer laureada más joven. En 2014 compartió el Nobel de la Paz con Kailash Satyarthi por su lucha a favor de los niños y la educación. Antes de su reconocimiento, el 9 de octubre de 2012 Malala fue llevada urgentemente al hospital por ser víctima de un atentado que la dejó gravemente herida; recibió varios impactos de bala cuando regresaba a su casa en un autobús escolar. Hasta la fecha continúa con sus exigencias por el derecho a la educación de los niños.
Rigoberta Menchú Tum (1959) es una líder indígena defensora de los derechos humanos y embajadora de Buena y consagrada Voluntad de la Unesco, miembro activo del grupo Quiché-Maya. Incursionó en la política, dejando una enseñanza breve pero concisa en sus diálogos. En 1992, el quinto centenario de la llegada de Colón a América, fue condecorada con el Premio Nobel de la Paz y en 1998 con el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional. El 12 de febrero de 2007 anunció que se postularía en las elecciones presidenciales de Guatemala del 2007, por la coalición de partidos WINAQ y Encuentro por Guatemala; quedó en quinto lugar. Pero un merecido lugar para hacer la voluntad máxima de expresión.
Albert Schweitzer (1875 – 1965) llevó diferentes disciplinas filosóficas, científicas y artísticas a un grado de expresión máxima en la visión de la armonía entre humano y humano. Fue un hombre preocupado por la crisis social y monetaria del mundo, por la pobreza y la hambruna en el viejo continente. En su vida fue médico, filósofo, teólogo, y músico, nacionalizado francés, misionero médico en África y Premio Nobel de la Paz en 1952. Sus prácticas fueron una idea radical en su filosofía: “Reverencia por la vida”. Era tío del filósofo y escritor Jean-Paul Sartre. No dejemos pasar un pensamiento más sano, en estos momentos tan difíciles para los humanos.
Albert Luthuli (Rodesia del Sur, 1898 – Sudáfrica, 1967) nació en la colonia británica de Rodesia del Sur; su familia le inculcó, desde niño, la misión y visión del cristianismo, sobre todo por la influencia de su padre, el misionero adventista John Bunyan Luthuli y Mtonya Gumede. Terminó sus estudios para proclamar la educación como máxima herramienta para el desarrollo de una sociedad igualitaria, sirviendo fielmente a su profesión como profesor. Luthuli estuvo por un tiempo en Christian Council Executive y en 1928 fue nombrado secretario de la Asociación de Profesores Africanos, para convertirse sucesivamente en presidente en 1933. En 1936 aceptó hacerse responsable de los miembros de su tribu, asumiendo el compromiso de jefe tribal hasta el 1952. Fue premiado en 1960 con el Premio Nobel de la Paz por su lucha contra el apartheid.