Gabo, con todas sus letras

Gabo, con todas sus letras

15 de julio de 2021

Citlali Figueroa

Cualquiera que escuche Gabo, de inmediato piensa: “Gabriel García Márquez”. Aunque solo hayas leído una obra de tremendo escritor, puedes reconocer e hilar a Cien años de soledad, un libro emblemático, con el que fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura en 1982. Nació en Colombia en el año de 1927, pero vivió en Cartagena, La Habana, París y por supuesto, México.

«Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo. Macondo era entonces una aldea de veinte casas de barro y cañabrava construidas a la orilla de un río de aguas diáfanas que se precipitaban por un lecho de piedras pulidas, blancas y enormes como huevos prehistóricos. El mundo era tan reciente, que muchas cosas carecían de nombre, y para mencionarlas había que señalarlas con el dedo». Así comienza la obra que he leído más de tres veces, la primera vez terminé un poco enredada entre una generación y otra –estoy segura que más de uno nos pasó–, hice el árbol genealógico de la familia, te encuentras a Macondo como un pueblo pequeño donde todos se conocen, pero también todos son familia. Recuerdo haber puesto un rostro a cada uno de los integrantes, fue así como logré disfrutar mi tercer lectura de Cien años de soledad, una obra que representa el realismo mágico y la época del boom literario.

La historia de amor entre un joven telegrafista pobre y poeta, Florentino y Fermina, la chica más hermosa que ha visto, se enamoran y se prometen amor, pero eso no convence al furioso padre. Fermina se casa con Juvenal, un rico médico que consiguió parar la epidemia de cólera. Parece que ella ya olvidó a su amor de la juventud, pero Florentino no, se apasiona por amor a Fermina, pero tiene relaciones con muchas mujeres, es amor, ese “Amor del alma de la cintura para arriba y amor del cuerpo de la cintura para abajo”.

El amor en los tiempos del cólera, es una obra que ha inspirado películas, otras obras y canciones, como Hay amores, de Shakira, o bien, Florentinos y Ferminas, de Los Caligaris. ¿Qué otra conoces?

¿Conocen el nombre de Rosa Cabarcas? ¡Claro! La dueña de una casa clandestina en Memoria de mis putas tristes, una reflexión del sexo, el amor, la vejez y el enamoramiento. ¿A qué edad encontraron el amor?, ¿se puede morir de amor? En esta novela, acompañamos a un viejo periodista que celebra su cumpleaños dándose un regalo para sentirse vivo: una joven virgen. Es que la chispa del amor rejuvenece el corazón, pero puede ser peligroso.

“Hay que estar siempre de parte del muerto”, en un pueblo donde todos saben que van a matar a Santiago Nasar, pero nadie le dice. Luisa Santiaga, madre de Gabo, se encuentra en un dilema ético y decide advertir a su ahijado sobre ello. Crónica de una muerte anunciada, es la novela basada en hechos reales que –por petición de su madre–, el autor espero 30 años para publicarla.

No necesitan más razones para leer la obra de García Márquez, y si aún no conoces alguna, es un buen momento para comenzar la colección con estas ediciones de tapa dura, encuentra todas en www.gandhi.com.mx +