Oscar Wilde, brillante, ingenioso e irónico
Oscar Wilde nació en Dublín, Irlanda, el 16 de octubre de 1854. Fue hijo de un cirujano oftalmólogo, William Wilde, cuyo prestigio le dio nombre a una incisión quirúrgica, aún practicada en la actualidad.
Es curiosa la vida familiar que desarrollaron los Wilde, rodeada de escándalos y gusto excéntricos; por ejemplo, la madre del escritor, Jane Wilde, era una poetisa que gustaba de vestir ropa estrafalaria y lujosa, llena de joyas y plumas. Sin embargo, su hijo, el pequeño Oscar Wilde, soportó los caprichos de su madre portando los vestidos y la ropa de niña con la cual lo vestía.
Por otro lado, su padre se vio envuelto en un escándalo. No sólo por ser un buen cirujano, sino por la acusación de haber violado a una de sus pacientes, mientras ella estaba bajo los efectos de la anestesia. Para la mala fortuna de la familia, William perdió el caso y, consigo, la reputación que le precedía como oftalmólogo.
Finalmente, Oscar Wilde no fue la excepción ante las controversias. En aquel entonces, a pesar de estar casado con Constance Lloyd, frecuentaba a lord Alfred Douglas, cuyo padre acusó al escritor de tener una relación con su hijo. La disputa trascendió hasta los tribunales y Wilde perdió el juicio, por lo que fue encarcelado y sentenciado a trabajos forzados de 1895 a 1897. La reputación de su carrera se vio afectada, pero durante su estancia en la cárcel escribió De profundis y La balada de la cárcel de Reading.
El 30 de noviembre de 1900, el escritor irlandés murió por complicaciones de una meningitis. +