101 años sin Henry James
Henry James, nacido en Nueva York el 15 de abril de 1843, heredó de su padre, considerado como un hombre culto y excéntrico, la pasión y el gusto por lo europeo. Entre los años de 1855 y 1860 estudió en Suiza, Alemania y Francia; el contraste ocasionado entre estos países y su natal Estados Unidos fue un punto de partida para alimentar su obra.
Constantemente señalado por un supuesto “afeminamiento” narrativo y su sensibilidad femenina, Henry James optó por considerar de poca importancia el tratamiento de dichos comentarios.
Derivado de este punto se habló de la naturaleza de sus relaciones con personas jóvenes como Walter Berry, Hugh Walpole, su amigo homosexual Howard Turgis, incluso del posible enamoramiento con su prima Mary Temple y la íntima amistad que mantuvo con la novelista Constance Fenimore, sin olvidar la rivalidad que existía entre él y Oscar Wilde.
Henry James, de clase media, no podía sostener el ritmo de vida que llevaban sus amigos aristócratas, lo que le impedía dedicarse a la dramaturgia tan continuamente como él hubiera deseado. Por tal motivo, su participación fue intermitente, lo que le consiguió apenas un par de reconocimientos menores, antes de que su obra “Guy Domville” fracasara y la retiraran apenas dos semanas después de su estreno y la reemplazaran por “La importancia de llamarse Ernesto” de Oscar Wilde. Trágica ironía que fuera sustituida por una pieza de su rival literario.
En una ocasión, Henry James llegó a decir que “H. G. Wells arroja información al lector como si su cerebro fuese un orinal que se vacía constantemente.”
James, autor de “Los papeles de Aspern”, escrita en Venecia, al borde de Gran Canal, falleció el 28 de febrero de 1916. Hoy se cumplen 101 años de su partida, por lo que lo recordamos con estas breves palabras.
MasCultura 28-Feb-17