Antes que olvidemos al rock mexicano
En “100 Discos esenciales del rock mexicano: antes de que nos olviden” de David Cortés y Alejandro González Castillo, se recopilan alrededor de cien discos que de alguna u otra manera, definen al rock mexicano de los últimos 40 años. Casi una centena de discos que para muchos permanecen presentes tal vez por la nostalgia y la búsqueda de buena calidad, y para otros pareciera que se han olvidado tras una ola del “Nuevo rock pop” entregado a una nueva manera de consumismo de música en español, que nada se parece al presentado en este libro.
El recorrido comienza con “Los locos del ritmo”, con el disco ‘Rock!’ en 1960, un puñado de adolescentes conocieron un nuevo género mientras pegaban los oídos al tocadiscos, con un vinil que giraba alrededor de 33 veces por minuto, nuestra primera versión mexicana de un intento de rock en español. Los setentas los abren “La Revolución de Emiliano Zapata”, en 1971 con el disco homónimo del grupo, después de ganar un concurso radiofónico y obtener un contrato con una disquera, el grupo se fue de gira y lanzó éxitos como ‘Nasty Sex’, con influencias de The Who, Creedence Clearwater Revival y King Crimson.
Más discos memorables de grupos como Náhuatl (disco homónimo), Three Souls in my Mind con ‘Adicto al rock n´roll’ y Nuevo México con el disco ‘Hecho en casa’ de 1975, una de las leyendas poco reconocidas del rock mexicano. Los ochentas comienzan con ‘Nadie en especial’ de Chac Mool, rock urbano que vio a su público en el Foro Carpa Geodésica, que abrieron paso para otros grupos como Decibel y Botellita de Jerez. Con todo y que los conciertos estaban prohibidos en la Ciudad de México, ésta década vio los primeros discos de Cecilia Toussaint, Iconoclasta, Silueta Pálida, y se posicionaron Luzbel, Rodrigo González, Jorge Reyes y Tex Tex.
Los grupos que nacieron en los noventas o que tuvieron mayores alcances, hasta la fecha siguen de alguna manera trabajando arduamente a pesar del poco apoyo de disqueras, promotores, empresarios, estaciones de radio, y un público que ha sido bombardeado por música comercial y que tal vez prefiere asistir a un festival con grupos extranjeros en lugar de apoyar a su bandas locales. Muestra de ello es el Festival de rock en español ¡Vive Latino! que surgió en 1998, a la falta de apoyo de grupos nuevos, de bandas de peso, en las últimas ediciones se ha llenado de bandas extranjeras, la gente pide rock verdadero, sólo que los tiempos han cambiado.
Caifanes con ‘Volumen II’ y ‘El Silencio’, Flor de Metal con ‘Ciudad azul’, Maldita Vecindad nos impresionó con ‘El circo’ en 1991, y más formas de música se dieron lugar con el público como La Castañeda con el disco homónimo y el ‘Re’ de Café Tacvba. El grunge en México realmente no tuvo un representante, aunque se les asocie a los de Guillotina, en 1994 Warner Music los firmó bajo la producción del legendario Jack Endino, quien produjo los primeros discos de Nirvana y Soundgarden. A lo largo de 18 años recorrieron todos los escenarios mexicanos y extranjeros, abriendo el espacio para muchas bandas con propuestas nuevas como Molotov, Radio Kaos, Disidente, Escarbarme y Glicerine. Hasta la fecha su legendario primer disco homónimo del grupo y ‘Rock mata Pop’ se siguen vendiendo y escuchando, sin haber sido una banda comercial pero un sonido claro y directo. Santa Sabina se hizo presente con ‘Símbolos’, demostrando que el rock puede tener un compromiso social sin sonar a panfleto.
Control Machete (Mucho Barato), Consumatum Est con ‘Nadie habla perfecto’, Hocico ‘Odio bajo el alma’, Julieta Venegas ‘Aquí’, La Lupita con ‘Caramelo macizo’, la lista es enorme para cerrar los noventas. Los escritores revisan discos hasta el 2010, y parece indispensable para los melómanos y los que en general deseen saber un poco más de nuestra música en español, el rock tan fuerte, presente y que parece nunca morirá.
"100 Discos esenciales del rock mexicano: antes de que nos olviden" de David Cortés y Alejandro González Castillo.
Mascultura 19-Sep-14