Juan Gabriel Vásquez dice que el Premio Alfaguara no cortará su ambición literaria
El escritor colombiano Juan Gabriel Vásquez dijo ayer en Panamá que haber ganado el Premio Alfaguara de novela 2011 no cambiará para nada su proyecto literario, y confesó que, en cierto sentido, asume la distinción como si fuera un hecho ocurrido en una vida paralela.
Vásquez se refirió a este y otros detalles de su narrativa durante una conferencia de prensa en la capital panameña, que visita como parte de la gira internacional para presentar su novela El ruido de la cosas al caer, con la que se adjudicó por unanimidad el Premio Alfaguara, dotado con 175.000 dólares.
El autor colombiano aseguró que este importante galardón no cortará sus ambiciones de seguir evolucionando como narrador, porque, dijo, siempre ha tenido "claridad sobre el tipo de escritor" que quiere ser y el tipo de libros que quiere escribir.
"Ahora resulta que uno de esos libros que escribí ha obtenido ese premio, pero eso no cambia en lo más mínimo mi idea de lo que será el siguiente libro, que lo escribiré con las mismas ideas con que escribí Los informantes (2004), la Historia secreta de Costaguana (2007) o el último", indicó Vásquez.
De hecho, explicó, "en muchos sentidos, para mí todo esto del premio ocurre en una vida paralela, como si le ocurriera a otra persona que no es el escritor sino una persona cualquiera, que va por ahí representando al autor y diciendo las cosas que más o menos piensa" el galardonado.
El autor también reveló que sus dos primeras novelas no aparecen referidas en las solapas de sus libros porque eran "terriblemente malas", y que su primera publicación "presentable" fue el libro de cuentos Los amantes de todos los santos (2001).
Vásquez recordó, al respecto, que fue con el libro de relatos Los informantes (2004), elegida en Colombia como uno de los más importantes de los últimos 25 años y finalista del Independent Foreign Fiction Prize del Reino Unido, que se dio cuenta que los escritores no deben imponer a su lectores "novelas no maduras".
En sus creaciones, afirmó Vásquez, le gusta abordar temas que generen debate y que incomoden, como es el caso de su novela El ruido de las cosas al caer, que está ambientada en la época de la violencia generada por el narcotraficante Pablo Escobar Gaviria en su país.
En este sentido, explicó que la novela explora el impacto de esta violencia en las emociones íntimas de la gente de su generación "en particular", la cual que "ha mutado pero sigue siendo un factor de desorden", según subrayó.
Sobre sus principales influencias, Vásquez dijo que desde que tuvo claro sus "obsesiones" y "el mundo que quería contar", se percató que el método del colombiano Gabriel García Márquez del realismo mágico no tenía "ninguna utilidad" para él.
Agregó que para sus novelas no le servía "para nada" las mariposas amarillas de Cien Años de Soledad, y que siempre supo de que los que sí le podían ayudar eran Philip Roth (EE.UU.), John Banville (Irlanda) o Javier Marías (España), entre otros.
"Para mí García Márquez se ha convertido en una especie de clásico vivo que no me amenaza en lo más mínimo, más bien me ha abierto puertas, porque fue el primero en demostrar que esto que digo es verdad ya que sus influencias no son de la novela colombiana sino de sus maestros Faulkner, Hemingway y Kafka", recalcó.
Juan Gabriel Vásquez parte el domingo próximo hacia San José, Costa Rica, para seguir con la gira de presentación de su libro que lo llevará también a Guatemala y Honduras, tras haber recorrido ya más de una docena de países.
Imagen: El escritor colombiano Juan Gabriel Vásquez
Panamá, 19 ago (EFE)