Carta Editorial | Todos los perros van al cielo
Carta editorial |Todos los perros van al cielo
1 de octubre 2025
Dicen que los perros no leen, pero basta verlos dormir junto a un escritorio o caminar entre los libros para intuir que saben algo de la vida que a veces olvidamos. En la literatura, los perritos no sólo aparecen como personajes entrañables, sino como presencias constantes en la vida de quienes escriben: cómplices de la soledad, guardianes del silencio y testigos de páginas que se resisten a nacer. Su compañía ha sido un recordatorio de lo esencial: paciencia, lealtad y esa capacidad de vivir el presente.
Con este número queremos homenajear esta relación tan especial entre quienes escriben y sus perros, una amistad que revela otra forma de entender la literatura: no desde la solemnidad, sino desde el juego, la ternura y la complicidad de un ladrido. Por eso hablamos con Xavier Velasco y Juan Villoro, cuya amistad ha trascendido gracias a una hermosa camada de gigantes de los Pirineos.
Sabemos que cada perrito es relevante, pero tuvimos que decantarnos por unos cuantos para hablar de las cualidades que más admiramos de ellos: para adentrarnos en el mundo de Snoopy —ese entrañable personaje que nos enseñó que la felicidad es un cálido cachorro— nadie mejor que Rodrigo Morlesin; sobre Boatswain, uno de los canes de Lord Byron, nos habla Magali T. Ortega (@nenamounstro), a quien le damos la bienvenida. Frida, la labradora de la Marina que salvó 12 vidas y detectó 53 cuerpos tras el sismo de 2017, también se encuentra en estas páginas.
Mientras preparábamos esta edición, sentimos la necesidad de abrir una reflexión más amplia: ¿qué significa tener un perro en un mundo donde todavía abundan el abandono y la indiferencia? ¿Qué responsabilidad asumimos cuando decidimos compartir la vida con otro ser que depende de nosotros? Para esbozar algunas respuestas, Liliana Blum nos comparte la historia de los perritos que la han acompañado a lo largo de su vida, mientras que, desde la arquitectura, Aura Cruz Aburto y Rodrigo Velasco nos invitan a pensar en las maneras en que podemos cohabitar con todas las especies, pues dicha posibilidad implica reconocer que los animales tienen derecho a ser cuidados.
A propósito de espacios y condiciones de vida más amables para los perritos, sigue el trabajo de @ishowerik —encuéntralo en Instagram y TikTok—, quien se dedica a elaborar sillas de ruedas para perritos que las necesiten.
Creemos que adoptar es reconocer que toda vida merece cuidado y respeto, que el amor a un perro no debería estar condicionado por el pedigree. Entonces abrimos las páginas a diversas asociaciones que se dedican al rescate de estos animalitos. Si después de leer sus testimonios decides apoyar su labor o adoptar a alguno de los perritos que resguardan, nuestro trabajo estará hecho.
Cuando pensamos en literatura y perros, lo que aparece no es la anécdota simpática, sino la certeza de que estos compañeros nos recuerdan que escribir —como vivir— también requiere afecto, cuidado y la valentía de hacerse cargo de otro.+










