Cristina Rivera Garza, la mexicana que podría hacer historia en el Nobel de Literatura 2025

Cristina Rivera Garza, la mexicana que podría hacer historia en el Nobel de Literatura 2025

A pocos días de que la Academia Sueca anuncie al ganador del Premio Nobel de Literatura 2025, un nombre resuena con fuerza en foros literarios, redes sociales y casas de apuestas internacionales: Cristina Rivera Garza. La escritora mexicana, conocida por su innovación narrativa y su compromiso con la memoria y la justicia, podría convertirse en la primera autora mexicana en recibir el galardón más prestigioso de las letras mundiales.

Nacida en Matamoros, Tamaulipas, en 1964, Rivera Garza ha construido una obra profundamente humana y feminista, capaz de entretejer lo poético con lo político, la memoria con el cuerpo y el dolor con la esperanza. Su literatura ha sido descrita como una forma de resistencia ante el olvido y la violencia, una voz que devuelve la palabra a quienes fueron silenciadas.

Su reconocimiento más reciente, el Premio Pulitzer de Memorias en 2024 por El invencible verano de Liliana, consolidó su posición como una de las voces más influyentes de América Latina. En esta obra, Rivera Garza reconstruye la vida y el feminicidio de su hermana, convirtiendo el dolor personal en una denuncia universal, recordando que su historia refleja la de miles de mujeres en México y la región.

Además de este texto emblemático, la autora cuenta con una extensa producción literaria que incluye títulos como Nadie me verá llorar, La cresta de Ilión, Me llamo cuerpo que no está y Terrestre. Su estilo híbrido, que combina poesía, narrativa y ensayo, le permite abordar temas íntimos y sociales con la misma fuerza, haciendo que su obra dialogue con movimientos contemporáneos y conecte con lectores jóvenes y críticos por igual.

El Premio Nobel de Literatura, instaurado en 1901 por Alfred Nobel, ha reconocido a figuras como Gabriel García Márquez, Octavio Paz, Toni Morrison y Annie Ernaux. Más allá del prestigio, el galardón incluye una dotación económica de 10 millones de coronas suecas y una medalla de oro. Hasta ahora, México solo ha tenido un laureado: Octavio Paz, en 1990. Treinta y cinco años después, Rivera Garza podría poner nuevamente a nuestro país en el mapa literario mundial.

Entre los otros favoritos de este año destacan Haruki Murakami, Margaret Atwood, Mircea Cărtărescu y Can Xue, pero pocos combinan la experimentación formal con una voz ética y política tan potente como la de Rivera Garza. Su posible triunfo representaría no solo un reconocimiento a su trayectoria, sino también una celebración de la literatura escrita por mujeres y de las voces latinoamericanas que han transformado la forma de narrar el dolor, la memoria y la identidad.

La cuenta regresiva ha comenzado: este jueves, desde Estocolmo, se sabrá si la autora que convirtió el duelo en arte y la palabra en resistencia, se consagra con el Nobel de Literatura 2025.