Cuentos entrañables por parte de Neil Gaiman

Las historias que escribe Neil Gaiman pueden resultar tan humanas que, al momento de leerlas y de estar conscientes de que en cualquier momento puede aparecer un ser mitológico o terroríficos dentro de ellas, nos nos genera esa sensación de miedo sino todo lo contrario, nos genera algo acogedor.

Material Sensible es una increíble recopilación de textos donde Neil Gaiman siente la necesidad de disculparse; A través de sus páginas discurre toda clase de brujas, monstruos y criaturas de la noche, satisfaciendo a sus fans incondicionales y adquiriendo a nuevos seguidores.

El mundo sensible no es más que un mero velo o una ilusión tras la cual se despliega un sinfín de realidades paralelas y mundos alternativos, casi siempre amenazantes y ominosos. En la mente de Gaiman todo es posible: laberintos lunares, amigos imaginarios de carne y hueso, iglús fabricados con libros, piratas muy peculiares, caseras asesinas, objetos hechizados, tarjetas de felicitación que alteran el espacio-tiempo… Un muestrario de circunstancias singulares que confieren a los protagonistas un abanico de experiencias capaces de revelarse conocimientos de sí mismos y emociones que ni siquiera sospechaban poseer.

“La gente me observa en la plaza, pero lo único que atrae su mirada es el movimiento. He perfeccionado un movimiento tan minúsculo que el transeúnte apenas puede decir algo que ha visto o no. ¿Sí? La gente no suele ver lo que no se mueve. Los ojos lo ven pero no lo ven, lo descartan. Yo tengo forma humana, pero no soy humano. Así que para conseguir que me vean, para lograr que me miren, para evitar que sus ojos se deslicen por mi figura sin prestarme ninguna atención, me veo obligado a hacer diminutos movimientos, para atraer sus miradas. Es entonces, y sólo entonces, cuando me ven. Pero no siempre saben qué han visto.

Pienso en ti como en un código que debo descifrar, o como es un puzle que debo resolver. O un romprecabezas que debo ensamblar. Paso por tu vida y me quedo inmóvil al limite de la mia. Mis gestos –estatuescos, precisos- suelen malinterpretarse. Te deseo. De eso no me cabe ninguna duda.”

Material Sensible / Neil Gaiman / Salamandra

MasCultura 13-ene-2017