Blanca Varela, su soledad existencial en las palabras

Blanca Varela, su soledad existencial en las palabras

Blanca Leonor Varela Gonzales, una poeta peruana, considerada como una de las voces poéticas más importantes del género en América. Lo mismo escribió poemas breves e intensos, que largos cantos acerca de la condición humana, aquella que yace en los ríos subterráneos del inconsciente.

Nació el 10 de agosto de 1926, hija de una popular compositora de valses criollos y casada con el pintor Fernando de Szyszlo, Blanca Varela estudió en la Universidad de San Marcos antes de trasladarse a París en 1949. Allí conocería a escritores como Henri Michaux, Jean-Paul Sartre y Simone de Beauvoir. Después de vivir en Florencia y Washington, se estableció definitivamente en Lima en 1962.

Sus temas esenciales son: el amor, los desencuentros, los personajes mitificados, la recuperación de la propia identidad, la incomunicación, el recuento, la necesidad del balance.

Blanca Varela, fue autora, entre otros, de los siguientes libros: Ese puerto existe (1949-1959), Luz de día (1963), Valses y otras falsas confesiones (1964-197 1) y Canto villano (1972-1978), Ejercicios materiales (1993), El libro de barro (1993) y Concierto animal (1999). En 2007, recibió el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana. Un año antes se le había otorgado el Federico García Lorca. Y en 2001, el Octavio Paz.

Blanca Varela fue una poeta que trasciende su soledad existencial en las palabras, como afirma en su poema Epitafio, murió un jueves 12 de marzo de 2009 en Lima. +

Deseos, piedras, cielo a jirones…

 

IV

Deseos, piedras, cielo a jirones,

ni un ave.

Estoy huyendo.

Una nueva montaña,

un río joven, sin ira.

 

Éste es el mundo que amo.

Quiero un cielo veloz,

la mañana distinta, sin colores,

para poner mis ángeles,

mis calles donde siempre hay humo y sorpresa.

 

 

Ejercicios

 

Un poema

como una gran batalla

me arroja en esta arena

sin más enemigo que yo

 

yo

y el gran aire de las palabras