Select Page

Leñero así

Vicente Leñero, lo sabemos bien, es un referente de nuestras letras. Se lo ha ganado a pulso con novelas como Los albañiles, Los periodistas y El evangelio de Lucas Gavilán; con guiones cinematográficos como El monasterio de los buitres, Mariana, Mariana, El callejón de los milagros, La ley de Herodes, La habitación azul y El crimen del padre Amaro; y con reportajes (Talacha periodística), crónicas (Vivir del teatro), ensayos (Los pasos de Jorge Ibargüengoitia) y dramas como La noche de Hernán Cortés y El martirio de Morelos. En más de una ocasión ha sido merecidamente galardonado por su larga trayectoria y cuenta, a diferencia de la mayoría de los escritores de nuestro país, con un público cautivo que lo sigue y disfruta de sus libros porque, entre otras cosas, son entretenidos, amenos y, al mismo tiempo, fieles a las problemáticas de una sociedad acostumbrada a nutrirse del sarcasmo, la tragicomedia y el humor involuntario de sus integrantes.

Además de lo anterior, Leñero es un escritor que en los últimos años se ha dado la oportunidad de confundir deliberadamente realidad con ficción, verdad con mentira, dando como resultado un puñado de textos hilarantes, contenidos en un par de libros tan creíbles como increíbles: Gente así (publicado en el 2008) y Más gente así (recién salido de la imprenta). En este último, Leñero nos ofrece dieciséis historias que demuestran, una vez más, que el ser humano es un animal de malas costumbres, ambiciones desmedidas y vacilaciones constantes, producto, quizá, de una lucidez intermitente que de vez en cuando se le va de paseo. Como sólo puede hacerlo un escritor con oficio y experiencia (que no es lo mismo), el narrador de cada historia (que, de entrada, parece el propio Leñero pero podría no serlo) recurre a fullerías literarias de primera línea para dar a conocer fábulas sin moraleja, anécdotas que nunca ocurrieron, cuentos que parecen ensayos, fragmentos de ensayos que parecen cuentos, entrevistas hipotéticas, chismes estirados hasta el paroxismo, exabruptos y retazos de una autobiografía que presume de ser lo que, en efecto, deberían ser todas las autobiografías de escritores: un invento, un artificio, un constante estira y afloja entre lo que pasó y lo que se quiso que pasara.

En Más gente así se podrán encontrar, además, personajes con nombres de individuos reales, algunos amigos del autor, y conocidos por todos: Rafael Ramírez Heredia, Manuel Puig, Carlos Fuentes, Gabriel García Márquez, Joaquín Díez Canedo, Graham Greene, Mariano José de Larra, etc. Otros que, sin ser reales, lo parecen debido a su siempre dudosa constitución moral y flexibilidad de carácter: Mónica Lezama, Genaro Derbez, Benjamín de la Garza, etc. Todo ello nos hace pensar en un volumen tan falto de pudor que debería traer una cintilla que dijera a modo de advertencia: “Como aquí va usted a enterarse de asuntos divertidos que no le incumben, se le pide discreción”.

Lo cierto es que, discreto o indiscreto, el lector no se aburrirá con este nuevo libro de un maestro que ha hecho de la prosa directa, concisa, exenta de florituras, ágil, franca e irreverente, su sello personal. Lo cierto es que, al terminar de leer Más gente así, le quedará la sensación de haber asistido a un banquete de orates clavados en su textura, maliciosos, inocentes y contradictorios como todos.

Por Lobsang Castañeda

Más gente así
Vicente Leñero
Alfaguara

Imagen: Portada del libro Más gente así de Vicente Leñero.
Mascultura 26-Mar-13