Más golpes, más palabras: 6 libros dentro del ring

Los juegos olímpicos son un evento milenario que se hacía en honor a los dioses griegos. No importaba si las naciones estaban en guerra, pues el motivo del festejo se superponía al desarrollo bélico fuera de Olimpia. No obstante, las Olimpiadas también eran un símil, aunque simbólico, de la fuerza de cada sociedad: una batalla más que exponía al mundo las habilidades de las naciones triunfantes.

En Río 2016, México apenas consiguió su primera medalla olímpica. El triunfo fue del joven Misael Rodríguez que, tras dieciséis años de no figurar en la categoría de boxeo dentro de los juegos olímpicos, logró imponerse contra el egipcio Hosam Abdin. Por dicha victoria, numeramos en esta lista, seis libros que se relacionan con el boxeo, deporte que hoy se llena de gloria.

En la primera esquina, de 21 años, tenemos a la joven escritora, ganadora del primer certamen de novela, Mauricio Achar, Aura Xilonen cuya obra se llama Campeón gabacho. Liborio es un joven que se va a Estados Unidos y termina trabajando en una librería. Se ve obligado a dejar México, pero ya en el gabacho tiene que enfrentarse a una serie de vicisitudes que lo ponen en la mira de varias personas. Liborio, un migrante y luchador nato que suelta golpes para defenderse, para sobrevivir, se verá inmerso en el mundo del boxeo. La supervivencia y el éxito lo conseguirá a punta de… golpes.

En la segunda esquina tenemos un peso pesado –categoría última en el boxeo varonil– de la literatura latinoamericana. Juan Carlos Onetti llega de la mano de su relato vencedor “Jacob y el otro”. Jacob es un boxeador que ha dejado atrás la edad de la opulencia y la excelencia física. Su mánager, Orsini, lo sabe, pero no deja de ver al boxeador con ojos de padre. Cuando un joven en mejor condición, con la gracia de los años cortos reta al campeón, hay un aire de incertidumbre que recorre el texto. Esta podría ser la última batalla de Jacob.

Más dura será la caída se asoma por entre las cuerdas del ring. La novela de Budd Schulberg, que también fue adaptada a la pantalla grande en los años cincuenta, narra la historia de Toro Moreno, un hombre argentino superdotado que incursiona en el boxeo de la mano de un estafador. Toro va ascendiendo, aunque su desempeño pugilista es deficiente, por los tratos que hace Nick. El verdadero conflicto de la obra se presentará cuando la batalla sea con el campeón favorito de los pesos pesados.

El paso del tiempo hace que a veces perdamos la cordura por detalles emocionales o meramente de rivalidad; en ese sentido, Rodney Stone de Arthur Conan Doyle incluye una parte fundamental de la historia del escritor. El texto tiene una influencia fascinante de la Inglaterra Previctoriana, con fuerte atención al boxeo y a la imagen de la juventud, con la que se describe cada contexto. A puño limpio y sin límite de asaltos, la novela detona todos nuestros sentidos. Los golpes son una especie de catarsis que no siempre se pueden controlar por más pacífico que se sea; las ciudades te vuelven violento a la hora de salir a la calle. En muchos condados de Inglaterra, el boxeo estaba prohibido: los púgiles eran perseguidos por la ley, pero siempre se realizaron peleas y nadie lo pudo evitar.

Jack London visitaba cada lugar que le llamaba la atención y vagaba horas y horas; en una ocasión tripuló un barco en busca de oro. Jack, asimismo, fue un conocedor del boxeo y de su historia. Knock out es un libro arriesgado, como el box, que es justo el tema que trata a lo largo de las páginas. En 'El bistec', por ejemplo, conocemos la historia de un boxeador en el último momento de su carrera, mientras que en 'El mexicano', en plena revolución mexicana, un joven se ofrece para ayudar a la causa y no morir en vano en el intento. Más allá de ser relatos que narren una historia sobre el boxeo, profundizan en la condición humana.

Es bueno aprender a golpear y más bueno si aprendes a ser golpeado como se describe en Del Boxeo, de Joyce Carol Oates. Puede ser dramático e incluso un cliché pero a final de cuentas, desde tiempos remotos, al ser humano le ha interesado lo extremo. El libro tiene una profundidad como los ganchos al hígado o los rectos de derecha al rostro. Un boxeador, un héroe, una mirada triunfadora y una vida exitosa después de todo. El boxeador tiene una vida dura como cualquier otra persona, lo diferente es que sabe golpear, sabe dónde y sabe cómo. También, el boxeador está en una perpetua lucha íntima, con decepciones y fracasos.

Por Ulysses Avath y R. R. Fullton

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