Fallece Philip Roth, una de las grandes plumas del siglo XX

El 22 de mayo de 2018 queda registrado como un día triste pues el novelista Philip Roth murió a la edad de 85 años. Con su deceso, se cierra un intenso capítulo en la historia de la literatura norteamericana; capítulo en el que Roth, Saul Below y John Updike fueron los indudables protagonistas.

Eterno candidato al Nobel de Literatura y laureado en los más prestigiosos premios literarios -National Book Awards, National Book Critics, PEN Awards, Pulitzer y Man Booker International-, Philip Roth comenzó su carrera literaria luego de servir dos años en el ejército. En 1959 publicó su primera obra, Goodbye, Columbus, y ya desde entonces su narrativa fue vitoreada por la crítica.

A lo largo de los poco más de 50 años que dedicó a escribir –se retiró oficialmente en 2012 tras recibir el Premio Príncipe de Asturias-, Roth dio vida a 27 novelas en las que exploró, entre muchos otros temas, las particularidades de la comunidad judía-estadounidense y los demonios personales desatados por las pasiones sexuales.

De su prolífica creación, cuatro obras serán recordadas para siempre como novelas insignia de la literatura del siglo XX: El lamento de Portnoy (1969), que lo lanzó al éxito internacional gracias a su ácido humor sexual y la caricaturización de las costumbres judías, y la Trilogía Americana, compuesta por las novelas Pastoral Americana (1997), que le valiera la obtención del Pulitzer; Me casé con un comunista (1998) y La mancha humana (2000). Aunque éstas son las novelas que mayor reconocimiento le granjearon, habría que agregar El teatro de Sabbath (1995), considerada por Harold Bloom la obra maestra de Roth y que estuvo entre las finalistas para la obtención del Pulitzer.

La influencia de Roth no se limita al universo de las letras: su poderosa narrativa migró al cine con las adaptaciones de siete de sus novelas, dos de ellas lanzadas el mismo año: Pastoral americana e Indignación, en 2016. Artistas de la talla de Al Pacino, Nicole Kidman, Anthony Hopkins, Ewan McGregor y Ed Harris han sido los encargados de encarnar a los complejos personajes salidos de su pluma. Uno de los capítulos más interesantes de la literatura estadounidense, comparable en muchos sentidos con la generación perdida o la mismísima beat, llega a su fin con la muerte de Philip Roth, quien supo retirarse en un buen momento pues, como señaló en una entrevista publicada en enero por The New York Times: “Había sacado lo mejor de mi trabajo, y lo siguiente sería inferior.”