Mery Cuesta, la crítica de arte, curadora, dibujante de cómics, baterista, amante de lo bizarro y lo "freaky" en CENTRO
El día de ayer se celebró en las instalaciones de CENTRO la conferencia “Cuatro piruetas del pensamiento en la cultura digital”, de la artista Mery Cuesta (Bilbao, 1975). La crítica de arte, curadora, dibujante de cómics y baterista, al terminar el acto conversó brevemente con MásCultura.
1. Barcelona es una ciudad vanguardista, alocada, maravillosa para vivir con el arte todos los días. Ahora con el alto desempleo, los okupas… descríbenos brevemente qué pasa en esta ciudad, ¿cómo se ha manifestado ante tanto cambio?
La verdad es que la situación en Barcelona actualmente es bastante crítica para las estructuras culturales y todos sus trabajadores. Han coincidido al mismo tiempo un cambio de color político (hacia un mayor conservadurismo), con una aguda crisis económica, y ya se sabe lo que suele ocurrir en estos casos: la cultura siempre se entiende como accesoria, y por eso es lo primero que se recorta. Ahora mismo estamos asistiendo al cierre de varios espacios y al congelamiento total de ayudas públicas y presupuestos. Muchos profesionales de la cultura estamos concentrados en externalizar nuestro trabajo fuera de España o incluso irnos de ahí por un tiempo, porque en ese país "no hay nada que rascar", como se suele decir. Sin embargo, es curioso que Barcelona siga funcionando como una marca atractiva, proyectando la ilusión de que en esta ciudad ocurren continuamente fenómenos y explosiones culturales. La marca 'Barcelona' funciona excelentemente a nivel internacional y genera una gran cantidad de turismo que llega a esta ciudad. Pero la realidad es que sus estructuras culturales son hoy precarias hasta la lágrima.
2. ¿Qué personajes femeninos te han marcado en tu vida? Pueden ser literarios, cinematográficos…
Aunque me siento muy mujer, lanzo mi trabajo desde la perspectiva femenina, y creo que entiendo perfectamente la idiosincrasia de nosotras las mujeres; no suelo favorecer en mi alimentación las creaciones provenientes de otras mujeres sólo por que lo sean. Soy bastante "paritaria" a la hora de elegir. Y una vez dicho esto, os diré que algunas mujeres que me han influido y me han construido con sus aportaciones y su actitud ante la vida podrían ser la bailarina de burlesque japonesa Erochica Bamboo, la hispanista belga Christiane Stallaert, la pintora Remedios Varo, la cantante Roisin Murphy, y muy especialmente Conchita Montes, actriz, escritora y creadora de pasatiempos de la España de los años 40 y 50. Me inspiran mucho también las mujeres que se dedican al ilusionismo (que existen pocas que no sean meras ayudantes), así como las bateristas: yo también toco la batería y me siento hermanada con otras mujeres que también lo hacen por el hecho de que hayamos elegido desempeñar en una banda y sobre el escenario un papel tan tradicionalmente masculino. Por cierto que María Félix, cuando yo era adolescente, me causaba una impresión tremenda.
3. Tu vida es la música, el cómic, el arte en general, ¿qué cosas desearías ver que normalmente no te topas en una galería, museo, la calle misma…?
Primeramente, lo que desearía encontrarme en museos y galerías (o sea en el ámbito legitimado del arte) serían las cosas insólitas de la vida. Soy muy defensora de lo que llaman 'cultura bizarra', esto es, el gusto por lo insólito, por lo que a veces es muy marginal y gusta sólo a unos pocos, pero que ahora, en el entorno digital, con Internet, puede tomar visibilidad. Me gustan las excepciones culturales, las aficiones personales fervientes y lo sorprendente: me interesa lo particular como punto de partida para componer la historia, en contra del concepto hegemónico de Historia (con mayúscula) disparada desde la Cultura oficial. La excepción es un reflejo de como somos los humanos: pura diversidad.
Por otro lado, en la esfera social en general, me gustaría que fueran argumento e ingrediente de debate público las cuestiones relacionadas con las conexiones entre el espíritu y el cuerpo. Creo que sería muy revelador analizar la realidad social también en base a estos puntos de vista.
4. Tu serie de historietas de Las mallas parlantes surgió por un altercado con un tipo un Estambul, cuéntanos si la venganza fue mejor de lo que imaginaste…
La venganza… ha dado mucho de sí. Está siendo tan satisfactoria que ha hecho que me haya olvidado del agravio. Llegué a Estambul en 2009 para realizar el cómic Istanbul Zombi 2066. Al principio andaba algo insegura porque Turquía es un país en el que las calles están llenas de hombres que increpan y someten bastante a la mujer a través de la mirada. El tercer día entré en una tienda a probarme unas mallas (unos leggins) y cuando estaba en el probador, el tendero entró para tocarme las piernas. Me defendí como pude y me encerré en casa toda la tarde. Entonces decidí que, para quitarme el disgusto, debía dibujar un cómic en el que, ayudada por los leggins que tomarían vida propia, volvería a la tienda y le daría un palizón al turco. Así nació toda la serie de cómic Las mallas parlantes que sigo desarrollando al día de hoy: unos leggins que hablan y van sembrando el caos en situaciones que le parecen aberrantes.
5. Nuestro país tiene mucha cultura kitsch. Ahora que estás en México, ¿qué esperas encontrar?
Pienso encontrar un torrente de referencias, de iconografía, de nuevas formas de pensamiento… Estoy muy excitada, principalmente por tener la maravillosa oportunidad de contrastar mis puntos de vista ante público mexicano, que tiene otras formas de entender el hecho cultural diferente al europeo. ¡Sé que México es un país inabarcable y pienso darme un buen festín!
Imagen: Mery Cuesta como presentadora en un capítulo piloto para alguna cadena de tv.
Video: Mery Cuesta en la entrevista para el programa Silenci del Canal 33 (TV3). Emitido durante marzo de 2007.
Mascultura 15-Mayo-12