Argentina

Probablemente lo primero que viene a la mente cuando se habla de Argentina sean lugares comunes como tango, pampa, Diego Armando Maradona, Lionel Messi, churrasco. Si hasta Robert De Niro bailó los compases de “Por una cabeza” en su papel de ciego veterano de la guerra de Vietnam, y hemos visto hasta la saciedad los dos goles que el 10 argentino le recetó a Inglaterra en México 86, es indudable que tanto su música tradicional como sus futbolistas son embajadores de peso, como 250 gramos de asado de tira. Si escarbamos un poco, descubriremos que se trata de un extenso país, más grande que el nuestro, considerado durante muchos como el granero del mundo gracias a su potencia agrícola, que obtuvo el primer premio Nobel de Ciencias otorgado a un país latinoamericano (el médico Bernardo Houssay, en 1947); y que, además, posee las primeras instalaciones nucleares del subcontinente. Sus glaciares son tan famosos que uno de ellos lleva por nombre Perito Moreno, en honor a su explorador; y se considera a Tierra de Fuego la zona más austral del continente.

Más allá de estas imágenes tradicionales, Argentina es una potencia cultural. Si como dice la canción, la cosecha de mujeres nunca se acaba, en el campo de la literatura, las huertas argentinas son prolíficas en escritores. Jorge Luis Borges y Julio Cortázar, por mencionar dos ejemplos canónicos que a fuerza de nombrarlos están en todas partes, representan lo que Maradona y Messi significan para el futbol: universalidad en boca de todos. Quizá la fama de estos dos enormes soles no deja ver con claridad el resto de su sistema solar en constante expansión y movimiento. He aquí un listado breve e incompleto: Ernesto Sábato, Roberto Artl, Horacio Quiroga, Leopoldo Lugones, Silvina Ocampo, Adolfo Bioy Casares, Juan José Saer, Rodolfo Fogwill, Martín Caparrós, Ariel Dorfman, Osvaldo Lamborghini, Oliverio Coelho, Betina González, Leopoldo Brizuela, Ricardo Pligia, Jorge Luján, Luis Pescetti, Ana María Shua. No es exagerado decir que el equipo de las letras argentinas está para disputar cien mundiales.

Como invitado de honor de la FIL 2014, esta nueva edición de Lee+ rinde un homenaje a las letras argentinas, y aunque en nuestros artículos no se menciona ni a Borges ni a Cortázar por considerar que ellos ya están más allá del bien y del mal, nos enfocamos en aquellos autores con obras y nombres de mucho peso, como César Aira, Martín Caparrós y Edgardo Cozarinsky; aquellos que están por convertirse en clásicos, como Manuel Puig o José Bianco; en las nuevas generaciones: Rodrigo Fresán, Andrés Neuman, Betina González; y no podíamos dejar de lado uno de los temas que han nutrido las historias argentinas: la férrea dictadura militar que transformó para siempre su historia. Para este artículo elegimos obras de otros grandes autores como Rodolfo Fogwill, Tomás Eloy Martínez y Osvaldo Soriano.

Así es que bienvenidos a Argentina, la tierra de Mafalda, Quino, Soda Stéreo, Liniers, cuyo personajes aparecen en nuestra portada; Eliseo Subiela, Daniel Barenboim y el Che Guevara.

Los editores

Mascultura 05-Nov-14