Ser un adolescente no es fácil y Greg Heffley lo sabe muy bien

Primero tuvo que pasar por un duro ambiente en el colegio, donde los chicos bajitos que aún no han pegado el estirón tienen que compartir los pasillos con grandulones que ya se afeitan dos veces al día. Lo bueno es que el diario que le compró su mamá le sirvió para desahogarse un poco.

Sus vacaciones de verano uff…también un desastre. No son un buen recuerdo para Greg y su hermano Rodrick se encargó de recordárselo gracias a que leyó su diario. Y es que todos los secretos acaban saliendo a la luz en cualquier momento.

Cuando Greg se libra al fin de su hermano, sus problemas comenzaron con su papá. Quién sabe de donde sacó la grandiosa idea de que Greg puede cambiar y quiere que sea más fuerte, así es que decide inscribirlo en todo tipo de deportes de competición, actividades de las que Greg siempre ha huido y sino se pone las pilas lo enviarán a una academia militar.

Otra vez Greg sale bien librado de sus problemas y, afortunadamente, llegaron las vacaciones. Por fin habrá paz y tranquilidad y lo único que Greg tiene en mente es que se la pasará encerrado en su casa, durmiendo y jugando videojuegos. Lo malo es que su mamá tiene otros planes para él, posiblemente ir al balneario, convivir más con la familia y porque no… pertenecer a un club de lectura.

DIARIO DE GREG 4. DÍAS DE PERROS
Jeff Kinney
OCÉANO TRAVESÍA