La revolución cubana llega a Moscú en vísperas del 20 aniversario de la caída de la URSS

Fidel Castro hablando ante el Congreso de EEUU o esquiando en Moscú, el Che Guevara jugando al golf o en su lecho de muerte, son algunas de las fotos sobre la revolución cubana expuestas en el año en que se cumple el vigésimo aniversario de la caída de la URSS.

"La exposición es la mejor clase de historia sobre Cuba que uno pueda recibir", aseguró hoy Marta Carreras, primera secretaria de la Embajada cubana en Moscú encargada de los asuntos culturales.

El Centro de Cultura Contemporánea "Garage" de la capital rusa ofrece hasta mediados de abril una amplísima selección de imágenes históricas sobre el antes, el durante y el después de la revolución cubana de 1959, con algunas imágenes inéditas.

"Hay bastantes fotos que yo no había visto nunca antes en mi vida. La mayoría de los cubanos no conocen esas imágenes", apuntó la diplomática cubana.

Las 250 fotos, que han sido cedidas por la Fundación Arpad Busson, incluyen imágenes de fotógrafos cubanos como Korda, Salas, Corrales o Arias, e internacionales como el francés Cartier-Bresson, el estadounidense Glinn o el soviético Baltermants.

La exposición es un viaje cronológico desde los tiempos en que los estadounidenses disfrutaban a lo grande del benigno clima de la isla caribeña, de sus casinos, sus habanos, su ron y de sus mujeres.

La miseria en la que estaba sumido el campesinado cubano, en particular "Niña con muñeca de madera" de Alberto Díaz (Korda), golpea a los visitantes de la exposición con fotos impactantes, que contrastan con las fiestas en la que "los gringos" y los representantes del régimen de Fulgencio Batista compartían mesa.

"La exposición es objetiva, ya que muestra cómo era Cuba antes del 59. Los casinos, la pobreza, la prostitución y los varentierra (choza). Así se entiende por qué se produjo el golpe revolucionario", dijo Carreras.

Las imágenes de Fidel saliendo de la cárcel o una foto de un Che barbilampiño e irreconocible dan paso a la victoria de la revolución y el derrocamiento de la dictadura de Batista.

"En los tiempos que corren de digitalización de la fotografía, es un privilegio ver los originales de acontecimientos históricos. Esta exposición es el mayor acontecimiento cultural en Rusia relacionado con Cuba en los últimos veinte años", dijo la diplomática.

A partir de ahí, los líderes de la revolución aparecen relajados, Fidel pescando, jugando al béisbol con atuendo deportivo o departiendo con el escritor norteamericano Ernest Hemingway, y el Che con un palo de golf en la mano o leyendo a Goethe.

Las siguientes salas muestran el dualismo que acompañó a los dirigentes cubanos durante los primeros años con sendos viajes a Estados Unidos y la Unión Soviética en busca de respaldo y financiación.

En EEUU, Fidel aparece dirigiéndose al Congreso norteamericano, dando un discurso ante decenas de miles de personas en el Parque Central de Nueva York o ufano recaudando dinero ante una mesa repleta de billetes de dólares.

Mientras, las imágenes del viaje a la URSS muestran a un relajado Fidel encendiendo un puro durante una reunión en Moscú con el dirigente soviético Nikita Jruschov, esquiando, deslizándose por un tobogán de hielo o a bordo de un gran trineo tirado por caballos.

Por supuesto, mención especial merecen los retratos del fotogénico Che, en los que siempre está presente esa mirada escrutadora y en la que sólo varía el tamaño de la barba, siempre descuidada, y el pelo, unas veces más largo, otras más corto, con gorra y puro o sin ellos.

Los moscovitas que se animaron a visitar la exposición se paran sin evitarlo ante las imágenes del británico Brian Moser, algunas nunca vistas en público, en las que el guerrillero argentino yace muerto en un camastro en Bolivia (1967), mientras los militares le levantan la cabeza y los pies para facilitar su identificación.

"Esas fotos del Che muerto en Bolivia impactan mucho. Son imágenes desconocidas y dolorosas para muchos cubanos. Lo tratan como si se tratara de un trofeo de caza. Recuerda a la pasión de Jesucristo", confesó Carreras.

Como no podía ser de otra forma, la exposición se ve coronada por la legendaria foto "Guerrillero Heroico" que hizo del Che Korda durante una discurso de Castro con ocasión de un funeral por las víctimas del sabotaje del barco "La Couvre" en marzo de 1960.

"El Che se había mantenido en un segundo plano. Se acerca a mirar el río de gente. Lo tengo en el objetivo, tiro uno y luego otro negativo, y en ese momento el Che se retira. Todo ocurrió en medio minuto", relató el autor.

El fotograma, que fue tomado como quien no quiere la cosa por Korda y que convirtió al Che en un icono moderno al publicarla la prensa cubana el día de su muerte, ya nota el paso del tiempo, al igual que la revolución cubana.

Moscú, 18 mar.

Imagen: El primer ministro cubano, Fidel Castro (i), acompañado del vicepresidente estadounidense Richard Nixon (d), al finalizar su  reunión en la Casa Blanca. EFE/UPI/Archivo