La importancia de llamarse ZaZa

Za Za puede significar muchas cosas o no significar nada. Parece el sonido de una máquina o el coro de una canción pegajosa. Pero Za Za no es ninguna de las anteriores, es el nombre de un simio feliz, es el apodo de un dealer retirado, es el nombre del barco más grande del mundo y el de una nueva droga, la madre de todas las drogas.

Pero ¿qué tiene qué ver una cosa con la otra? Ray Loriga construye una divertida historia en la que un ex dealer, que trata de vivir una vida tranquila en Ibiza, se ve envuelto en una confusa situación en la que todos lo creen el hombre más importante del momento, el creador de la droga más espectacular. De esta manera, gente de su pasado lo busca para sacar provecho de él, desean que los incluya en el negocio; mientras que nuevas personas, desconocidos hasta ese momento, lo hacen para protegerlo. Se trata de un mundo ambivalente en el que un hombre es quien no sabía que sería.

Pero en una historia como ésta, que habla de traficantes, drogas e Ibiza, no podían faltar mujeres, aventuras, matones, pasiones desatadas, sexo, fiestas y excesos. Una historia plagada de ironía con personajes descabellados y sinvergüenzas, porque sólo así podría ser la historia de Zacarías Zaragoza Zamora, o mejor conocido como “Za Za, emperador de Ibiza”.

Za Za no sólo intenta vivir como un traficante retirado, sino que además desea pasar desapercibido por el mundo. Es un hombre que busca una vida simple, pero no porque aprecie las cosas sencillas por sí mismas, sino porque es un pesimista, un hombre que no pretende la felicidad, sino la tranquilidad. En una obra de tal carácter irónico esto tiene que ser imposible. Así que entre más pretende ausentarse del mundo, más enredado termina en él, porque “cuando uno no encuentra a qué agarrarse, se agarra de cualquier cosa”.

Pero hay que ver que la ironía y el humor que existen en esta novela no son vacíos, nunca lo son, detrás de todo esto, de una historia simpática, de una serie de encuentros donde las casualidades abundan, se encuentra un hombre que está enfermo del mundo, porque el mundo se enferma de alegría. Este es el efecto que produce Za Za, pero no el hombre, sino la droga, una gran euforia, una risa desbordada.

¿Pero qué hay del simio también llamado ZaZa? El simio forma parte de un experimento para desarrollar la droga, es la víctima de un neuropsicólogo ambicioso. El mono se desbarata de la risa con la droga al igual que los seres humanos. Porque, como demuestra la novela, no somos tan diferentes. Sin embargo, en el tono que caracteriza a esta obra, Loriga llevará hasta lo grotesco y disparatado las semejanzas entre simios y humanos, y la envidia que puede sentir el hombre por la naturaleza animal, por esos seres desinhibidos, sexuales.

La narración de la novela es rápida, ligera y cambiante, así como la vida de Za Za se transforma en un abrir y cerrar de ojos, pero también como el ambiente que se respira en Ibiza, isla a la que llega el enorme yate ZAZA. Nada está fuera de lugar, cada personaje nuevo, cada historia, se relaciona directa o indirectamente con el original Za Za, el emperador de Ibiza.

“A menudo los icebergs flotan invertidos”, así es la novela de Ray Loriga, en ella sucede todo y de todas las formas posibles hasta reencontrarnos en una pequeña punta que da origen a la historia.

Perla Holguín

Imagen: Portada del libro “Za Za, emperador de Ibiza”, de Ray Loriga.
Mascultura 14-Abr-14