Monsiváis, recordado por amigos y compañeros tras casi un año de su muerte

El escritor mexicano Carlos Monsiváis fue recordado hoy en un homenaje celebrado en el Castillo de Chapultepec de la capital mexicana, una cita a la que asistieron compañeros y amigos suyos, y que amenizó el flautista Horacio Franco.

El acto de reconocimiento lo organizó el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) como antesala a un foro que tendrá lugar el 19 de junio próximo cuando se conmemore el primer año de la muerte del escritor.

El autor fue recordado por figuras cercanas a él como Rolando Cordera, Francisco Pérez Arce y el etnólogo mexicano Luis Barjau, con quien Monsiváis coincidió en la Dirección de Estudios Históricos del INAH en los años setenta.

Pérez Arce leyó en el acto unas palabras escritas por el poeta José Emilio Pacheco dedicadas a su amigo Monsiváis.

Barjau dijo que el escritor (1938-2010) fue "uno de los pensadores políticos y culturales más importantes de México".

"Admiro mucho a Carlos y pienso que es un intelectual de enorme complejidad que logró ubicarse en los dos niveles, en la alta cultura refinada, las letras mexicanas, y como un personaje muy popular, asunto demostrado muchas veces pero en particular en el momento de su entierro y su homenaje en (el Palacio de) Bellas Artes, donde se volcó el pueblo", agregó.

Para el etnólogo mexicano, la mejor manera de "entrar y de conocer a Carlos Monsiváis es a través de sus obras de crítica literaria".

"Ahí uno puede ver al Carlos Monsiváis de cerca. De otra manera, en la crónica periodística, es un hombre con una escritura muy compleja, barroca diría yo, y difícil de penetrar, de entender, no el sentido de su ironía sino la dimensión del intelectual, quién era Carlos Monsiváis", apuntó Barjau.

Para tener una proximidad con él, aquellos que no estén muy familiarizados con su obra deberían leer su "Antología de poesía mexicana" y el libro "Escribir, por ejemplo", añadió.

Tras su muerte, el poeta José Emilio Pacheco, Premio Cervantes de Literatura 2009, dijo de su amigo que con él desaparecía "una conciencia crítica irremplazable" en México.

"Nos queda, en cambio, una obra vastísima que empezó en Días de guardar (1970) y culminó en Apocalipstick (2009), uno de sus grandes libros", agregó entonces.

Pacheco calificó a Monsiváis de "valiente, lúcido, implacable" y dijo de él que "estuvo siempre con las minorías y los oprimidos".

A futuro sugirió "leerlo y releerlo y darle al fin el sitio que merece entre los grandes escritores mexicanos de todos los tiempos".

México, 27 abr (EFE)