El compromiso de Rafael Alberti
Las circunstancias son, muchas veces, las que motivan a escritores a tomar partido por alguna causa. Recordemos a Sicilia, en México, cuando encabezó el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, al lado de intelectuales y activistas. Otro caso parecido es el de Rafael Alberti, cuando se inclinó por una postura disidente a la que imperó en la España del siglo XX.
Nació en Cádiz el 16 de diciembre de 1902. Tenía ascendencia tanto italiana como irlandesa y un carácter difícil; esto último ocasionó que fuera expulsado de la escuela a los catorce años. Su pasión era la pintura, pero fue el fallecimiento de su progenitor lo que lo motivó a escribir sus primeros poemas. Con la muerte de su padre, nació el poeta Rafael Alberti.
Fue bajo la dictadura del General Primo de Rivera (1923-1930), que Alberti comenzó a politizarse y a plasmar sus inclinaciones políticas en su obra. En una ocasión llegó a confesar: “Comprendí que la poesía que hacíamos no era válida, que teníamos necesidad de otra cosa. No puedo tener las venas en un sitio y la sangre en otro.”
Rafael Alberti se comprometió cada vez más con posturas de izquierda. Se afilió al Partido Comunista en 1931 y, mientras la guerra civil asediaba su país, se llegó a entrevistar con Stalin en Moscú. Todo esto le costó el exilio en diversos lugares como París, Buenos Aires y Roma, a lo largo 38 años. Cuando pudo regresar dijo: “Me fui con el puño cerrado y vuelvo con la mano abierta como símbolo de paz y fraternidad entre todos los españoles.”
El 28 de octubre de 1999, el poeta de la Generación del 27 falleció en El Puerto de Santa María. Hoy se cumplen 20 años de su muerte, por lo que recordamos su poesía y compromiso que tuvo a lo largo de su vida.