Murmullos sobre Juan Rulfo
A Rulfo se le conoce por la calidad de sus textos, su sobriedad y profundidad alcanzada con obras no tan vastas. Sus personajes y sus mundos han trascendido más allá de su tiempo, expuestos entre las páginas cargadas de fantasía y desolación. Juan Rulfo escribió poco; lo curioso son la grandes cantidades de estudios, tesis, artículos y disquisiciones que se han realizado a partir de la obra de uno de los escritores latinoamericanos más importantes del siglo XX.
Juan Nepomuceno Carlos Rulfo Vizcaíno nació el 16 de mayo de 1917, en Apulco, Jalisco. Su padre falleció cuando apenas contaba con siete años y, tan sólo cuatro años después su madre también murió, por lo que se trasladó a San Gabriel, con su abuela. Sin embargo, después pasó a vivir en el orfanatorio Luis Silva en Guadalajara.
Su carrera literaria comenzó con pequeñas publicaciones en revistas en 1934. En los años cuarenta incursionó también en la fotografía. Muchos de sus cuentos publicados de manera independiente son ahora el cuerpo de “El llano en llamas” publicado por el Fondo de Cultura Económica en 1953. Dos años después dio a conocer la novela que lo inmortalizaría: “Pedro Páramo”.
Guillermo Samperio cuenta que una vez, mientras Juan Rulfo caminaba junto al rector de una universidad de los Estados Unidos, entraron a una sala especial, de cuya puerta colgaba un letrero con el nombre del escritor mexicano. Ahí encontraron numerosos estudios sobre la obra de Rulfo, quien después de un momento comentó: “¿Y todos estos han vivido y se han alimentado de lo que yo he escrito?”. Hoy en día, los trabajos sobre el escritor jalisciense se han multiplicado indudablemente.
El 7 de enero de 1986 Rulfo falleció. Hoy se cumplen 29 años de su partida, por lo que, junto con los murmurantes de Comala lo recordamos en este aniversario luctuoso.
Con información de: “El Edén sombrío de Juan Rulfo a 95 años de su natalicio” en Coordinación Nacional de Literatura.
Mascultura 07-Ene-15