Dos reseñas sobre separaciones

Dos reseñas sobre separaciones
17 de febrero de 2020
El silencio y el desamor: Siete sitios sin ti
Ilallalí Hernández

Las crisis sentimentales y el desamor son temas recurrentes en las obras literarias de todos los tiempos, y este es el tema de Siete sitios sin ti (editorial Dibbuks), el más reciente cómic de Juan Berrio (Valladolid, 1964) que nos ofrece nuevas luces sobre un hecho casi cotidiano.

Berrio es conocido por crear novelas gráficas costumbristas, todas marcadas por un dejo de tristeza. Es difícil no quedar subyugado ante el encanto de sus proyectos donde los amores platónicos, la melancolía y el olvido integran la atmósfera donde el trazo, la narración —e incluso los colores— envuelven a los lectores en la tragedia de los hechos. Esta novela gráfica narra la historia de Elena y Jorge: ellos viven en casa de los padres de él; pero, desde hace poco, algo no está del todo bien. Jorge consiguió su primer trabajo, pasa menos tiempo en el hogar y aparentemente está cambiando. Elena se siente sola y, tras mucho pensarlo, decide irse para comenzar una nueva vida.

La nueva vida de Elena se revela en pequeñas situaciones cotidianas (los amigos comunes, los gustos similares, la historia que construyó con Jorge). Estos hechos transcurren a lo largo de siete capítulos, donde los sitios compartidos se transforman en protagonistas de un mapa personal que intenta superar la ruptura, pues los silencios y la despedida definitiva son una situación no resuelta que, al final, revela la manera cómo se viven estos problemas.

Aunque Elena es la protagonista, la fuerza de sus sentimientos nada tiene que ver con el hecho de que sea mujer; la ruptura que muestra Berrio es universal: todos tomamos decisiones difíciles, nos aferramos a ellas y cerramos los capítulos de la vida compartida para descubrir que algo profundo se ha transformado. Gracias a los colores, los sentimientos y los silencios van asumiendo un intenso protagonismo, la repetitiva presencia de un amarillo pálido que “acartona” las viñetas permite que los tonos azules, rojos, violetas, verdes y naranjas hagan nuevas aportaciones a la transformación de Elena. Seis de los siete lugares son espacios cerrados, absolutamente íntimos; pero, al llegar al séptimo —un parque— se puede percibir una transformación esperanzadora.

La historia se sitúa en los años noventa, cuando no existía el ruido y la inmediatez de las redes sociales. Hoy sería más difícil poder no saber nada del otro; sin embargo, eso no significa que no existan posibilidades de caer en el abismo del silencio cuando se decide terminar una relación. Siete sitios sin ti es sugerente no sólo por su título, pues esta historia sencilla y clara, ausente de consejos o juicios, puede transformarse en un espejo capaz de reflejar nuestras historias.

El doble muro entre Estados Unidos y México: El muro que ya existe
Edgar Krauss

Cuando están en campaña, los políticos suelen ofrecer más de lo que pueden cumplir. Ellos se empeñan en ocultar las realidades inconvenientes en términos de la rentabilidad electoral. El actual presidente de la nación más poderosa de la tierra lleva años prometiendo que va a construir un muro en la frontera con México, cuando en realidad ya existe, y por partida doble: uno físico y otro burocrático. El segundo es el más implacable.

En México y otros países, miles de personas huyen de sus casas cada año, escapando de la violencia y la pobreza. Su fin es alcanzar “el sueño americano”, por lo que deben superar una serie de obstáculos en los que arriesgan su vida, integridad y sus escasos recursos. Si logran huir de las salvajes pandillas que azotan naciones enteras como Honduras o El Salvador, aún deben sobrevivir al tramo más infame de la pesadilla: atravesar el enorme territorio mexicano, donde son víctimas de secuestro, robos, extorsión, violaciones, asesinato y desaparición, a lo largo de un larguísimo recorrido en las peores condiciones imaginables. Tan sólo la distancia de Tapachula a Nuevo Laredo es de dos mil kilómetros, aunque se trata de la ruta más corta, ella es el escaparate feroz del crimen organizado.

Para las personas que, a pesar de todo, logran llegar a los Estados Unidos, ya sea de nacionalidad mexicana o de otras, y soliciten de manera legal su residencia, o pedir que los acepten en condición de refugiados, deben primero enfrentar al ominoso dispositivo kafkiano de una maraña burocrática diseñada para restringir al máximo la inmigración. La periodista Eileen Truax nos explica que, mientras se resuelve jurídicamente su estatus migratorio, estas personas son encerradas en condiciones incompatibles con los derechos humanos más esenciales. Se les priva de alimentación adecuada, ropa digna, calefacción y asistencia legal. Incluso, de atención médica. Además, pueden estar encerradas durante años esperando una respuesta que, muy probablemente, será negativa. Este limbo no había sido radiografiado hasta la médula, hasta que lo hizo Eileen Truax, la experimentada periodista mexicana que ha dedicado incontables años a investigar, documentar y exponer con lucidez las numerosas vertientes de la frontera más desigual y compleja del mundo.

En su libro El muro que ya existe (publicado originalmente en inglés bajo el título We built the wall), Truax da voz a las víctimas, pero también a gente como el abogado Carlos Spector, que trabaja gratuitamente por defender la dignidad humana y los derechos esenciales de las personas migrantes. La necesaria lectura del libro de Eileen Truax adquiere especial relevancia en la situación actual, pues el sistema migratorio de los Estados Unidos se encuentra en debate, debido a la campaña electoral, y porque México tiene mucho trabajo por hacer en la defensa de los mexicanos en aquel país, a la vez que tiene la obligación de garantizar los derechos humanos y la seguridad de las personas migrantes que se ven forzadas a cruzar nuestro país, soñando con una mejor vida al otro lado. Migrar es un derecho y es parte de la condición humana misma. Estamos hechos de migraciones: es quizá la única constante de la historia universal.

En El muro que ya existe, felizmente publicado por HarperCollins México, Eileen Truax demuestra su profundo conocimiento de la frontera, reivindica su vocación por contar las historias de la gente que huye de la violencia y se afianza como una de las periodistas más notables de nuestro tiempo. El enorme escritor Martín Caparrós, quien escribió el prólogo para este libro, describe el periodismo de Truax como una herramienta para mejorar la vida de las personas. Qué afortunados somos sus lectores.+